Reino Unido.- Después de cinco años alejada de la escena musical, Adele está de regreso con un primer sencillo, “Easy On Me”, que se desprende de su nueva producción y que tras su lanzamiento se ha mantenido en los primeros lugares de las listas musicales a nivel mundial.
La canción explica a su ex marido, Simon Konecki, y al hijo que procrearon por qué decidió finalizar su matrimonio. Y su video, el cual estuvo bajo la dirección de Xavier Dolan, es una oda a la emotividad de una mujer recién divorciada.
Por una parte la cantante británica logró la reacción generalizada que esperaba de sus fans, pero por otro lado la artista podría enfrentarse a una severa multa por llenar de basura las carreteras del distrito metropolitano de Doncaster, en Inglaterra.
De acuerdo con lo declarado a través de la cuenta oficial en Twitter del lugar, ya son muchos los habitantes que hacen referencia a una de las secuencias del videoclip en la que Adele conduce un coche del que salen volando papelitos.
“Se le impondrá inmediatamente una multa por tirar basura”, dice el anuncio desde esa plataforma. “A pesar de sus reiteradas peticiones, no seremos indulgentes con ella”, sentenciaron.
Al parecer no todo está perdido, pues surgió una propuesta para que la baladista pueda zafarse de dicha multa: “que permita usar un plano de su vídeo musical, en la que sus ojos aparecen reflejados en un espejo retrovisor, como nueva imagen de un anuncio público que advierte de las penalizaciones a las que pueden enfrentarse las personas que arrojen residuos en la vía pública”.
Por lo que la cantante, sus representantes y su equipo jurídico ya se encuentran estudiando la situación.
Por otra parte, varios internautas que son muy observadores ya dieron cuenta de que la matrícula del vehículo que aparece en el vídeo musical, tiene una matrícula americana, por lo que cabe la posibilidad de que en realidad no se rodara en Reino Unido.