Escuchar música emanada por el conjunto de manos y piano que dirige Mikhail Rudy, mientras que en el telón se proyectan animaciones de las obras de Vasili Kandinski, fue la experiencia que disfrutaron los asistentes al concierto de piano “Cuadros de una exposición”.
En el Teatro del Bicentenario, el pianista ruso ofreció dos horas de una experiencia diferente a los reunidos en el recinto quienes salieron satisfechos de ser partícipes de un evento con esa calidad musical y visual.
Durante la primera parte del concierto, el célebre pianista interpretó cuatro nocturnos de Chopin y la Sonata en si menor de Franz Liszt, para luego continuar la segunda parte con una experiencia especial.
En palabras del pianista lo que hace importante la puesta en escena de Kandinsky es la progresión dramática que comienza de una manera leve con el sol saliendo y que cuanto más se adentran más extravagante se convierte.
Las 16 pinturas presentadas acompañadas de notas musicales escritas por Musorgski formaron parte de una propuesta musical que de acuerdo con la crítica internacional, fusiona de manera magistral el trabajo de ambos artistas.
Musicaliza arte
En el Teatro del Bicentenario, el pianista ruso Mikhail Rudy ofreció dos horas de una experiencia diferente a los reunidos en el recinto.