Le niega IMSS su pensión

Jesús Herrera Palacios tiene 62 años, es comerciante; de 1969 a 1992 (22 años) tuvo una ferretería con la cual se ingresó a cotizar al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en 1992 cerró la ferretería pues el negocio fue a la baja, sin embargo por desconocimiento nunca tramitó su pensión ante el Seguro Social.
Hace dos años, Jesús Herrera tuvo una muy mala racha económica, un amigo de él, quien es contador, le explicó que podía solicitar su pensión ante el Seguro, y así lo hizo, acudió a las oficinas del IMSS en la calle Sopeña, donde se hacen los trámites de pensiones y jubilaciones, sin embargo, le dijeron que necesitaba cotizar un año más para actualizarse.
Extravían información en el IMSS
Detalló que de acuerdo con la Ley del IMSS de 1970, que es la que a él le aplica, él debía cotizar 750 semanas ante el IMSS para poder jubilarse y en los 22 años de trabajo cotizó 1 mil 144, es decir, se excedió por 394 semanas, casi 7 años: “Nunca me avisaron que ya podía tramitar mi pensión, un papel o algo, yo no soy mago para saber”, comentó.
Sin embargo, al solicitar su pensión al IMSS en junio de 2011, le informaron que tenía sólo 890 semanas cotizadas, es decir, que casi cinco años de cotización se extraviaron sin ninguna explicación. “No sé por qué dicen que 890, así dice en el papel que me dieron en la oficina”, explicó.
Además de este extravío le informaron que tendría que cotizar un año más y que le reducirían todavía más las semanas cotizadas, no le precisaron cuánto más, por concepto de manejo de cuenta, lo cual considera injusto pues todo eso es dinero que durante años él se ganó.
El afectado está en disposición de cotizar un año más, pero sabe que será complicado, pues con su avanzada edad y padecimientos como arritmia, hipertensión y obstrucción de una arteria pulmonar, entiende que nadie lo empleará para afiliarlo al IMSS durante un año.
“Ahora me dicen que para que me den una pensión de por lo menos unos 5 mil pesos al mes tengo que cotizar con seis salarios mínimos o más durante cinco años, de dónde voy a aguantar trabajar otros cinco años con todas las enfermedades que traigo”, cuestionó.
Agregó que por supuesto no es la única persona con este problema sino que hay mucha gente en la misma situación, ya que antaño no había tanta facilidad para informarse sobre este tipo de trámites y mucha gente no lo realizó.