Alejandro Salazar Ramos es el propietario de un Volkswagen modelo 1963, que es único en la Capital al tener más del 80 por ciento de sus partes originales.
Lo compró hace 12 años cuando acompañó a su compadre a un lote de automóviles porque iba a comprar su primer auto.
Al estar observando las unidades, vio el Volkswagen y le gustó mucho, por lo cual su compadre prefirió prestarle el dinero para que lo comprara y él se esperó.
Cuando tuvo el vehículo en su casa comenzó a dedicarle mucho tiempo, le fue comprando partes nuevas y arreglándole varias cosas que tenía en mal estado.
Para definir el color tardó mucho tiempo ya que quería un color único. Un día Alejandro caminaba por la calle y se encontró con un globo sucio, de color amarillo que le gustó, llevó el globo como muestra y pintó el vocho de ese color.
El automóvil recibió el nombre de “ Old school”(vieja escuela), es por la época que es el carro y con esa época Alejandro se identifica con el rock and roll y es su género musical favorito.
Después de un año que lo compró y lo comenzó arreglar fue cuando lo dio a conocer, luciéndolo en la calles de Guanajuato.
El Old School -como mejor lo conocen por las calles de Guanajuato- pertenece a momias Guanajuato Bugs Club, en el 2003 ingresó a este equipo.
Dentro del club ha encontrado muchos amigos que lo motivan, lo ayudan para seguir arreglando y luciendo el vocho de 1963.
El auto tiene todas las piezas originales, aún de agencia, sólo que algunas se mandaron cromar; piensa mantenerlo es ese estado y según su dueño sólo le faltan otros asientos más clásicos.
Llama la atención de varios
Una experiencia que tiene muy marcada fue cuando de camino a un evento en Colima, en el camino se le tronó una llanta trasera, por lo que tuvo que orillarse y esperar a que alguien lo ayudara. Mientras esperaba, muchas personas que pasaban le comentaban que su vocho estaba muy bonito, lo que le dio mucho gusto ya que se puede notar el esfuerzo y el empeño que le ha puesto para dejarlo como está.
Su familia siempre lo ha apoyado en las decisiones que toma con el vehículo al salir y al ponerle una cosa nueva.
Seguirá mejorando el Old School, ya que asegura que lo quiere como a un hijo; nunca lo desentiende, día a día lo revisa de todo a todo y piensa en varios cambios.