A los 16 años de edad, fue víctima de asalto, dos años después decidió entrar a la Policía Municipal para trabajar contra la delincuencia.
Tiene una petición para la gente, que los dejen trabajar, que no escondan a los delincuentes, que no se interpongan en su trabajo y que denuncien para terminar con los delitos.
Se trata del oficial Jiménez, quien apenas pasado sábado 24 de enero, junto con otros compañeros recibieron motocicletas nuevas y un vehículo para patrullar las calles y tratar de evitar robos y asaltos.
“Yo fui víctima de la inseguridad cuando tenía 16 años de edad. Esa vez regresaba a casa después de ir a un fiesta, pero me asaltaron a mi y a otro amigo cuando caminabamos por el barrio de Pastita. Nada más recuerdo que uno de los asaltantes tenía mal un ojo. Llamé a la Policía y acudieron pero no detuvieron a nadie.
“Entonces me llamó la atención ser parte de la Policía Municipal y a los 18 años de edad me incorporé a las filas, fue mi primer empleo formal”, recordó.
Se puede ver al oficial Jímenez manejando la motocicleta, lleva la torreta encendida por toda la ciudad junto a sus compañeros y al escuchar el llamado de apoyo del resto de los policías, acelera y acude a ayudar.
Antes de formar parte del equipo de motociclistas, tuvo que realizar sus recorridos a pie, incluso enfrentó varias veces el peligro.
“Siempre hay que tratar de ser uno de los primeros en llegar a atender los reportes ya sea en motocicleta, en una patrulla o a pie, pero hay que darle solución a los llamados de emergencia dentro de los diez minutos de pánico.
“Me han tocado balaceras en El Cerro del Cuarto, con los grupos de delincuentes de ese lugar y también he tenido que detener a delincuentes que se dedican a robar en las casas y a cristalear los vehículos, esas cosas son las que tienes que enfrentar siendo policía”, agregó.

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