Siempre atento

Su trabajo es mantener vigiladas las instalaciones de la Policía Municipal y atender a las personas que diariamente van en busca de ayuda y soluciones.
Es el oficial Quiroz, procedente del Distrito Federal, es uno de los tres policías que se encargan en diferentes turnos de mantener la seguridad en la entrada y al exterior de la corporación.
Siempre está atento para atender a la gente que acude a la Policía Municipal para ofrecer alguna solución a las situaciones que enfrenta.
Tiene cinco años trabajando en la dependencia preventiva, la mayoría del tiempo ha sido asignado a la vigilancia de la entrada principal y aunque parece fácil, tiene sus riesgos.
Pero también sabe patrullar las calles y recorrer los callejones a pie, a veces bajo los rayos del sol otras veces en la lluvia o en el frío.
“Hay que saber cómo tratar a las personas que vienen, pues llegan molestas sobre todo cuando tienen algún familiar detenido”, explicó el oficial.
Mencionó que vigilar la entrada de la Dirección de Policía Municipal Preventiva es una gran responsabilidad y representa peligro.
“Estar aquí en la puerta representa riesgo porque mis compañeros han detenido a delincuentes peligrosos, entre ellos homicidas, secuestradores, sicarios, violadores, asaltantes y gente armada, entonces hay que estar atento, mantener despejada el área porque uno no sabe si van a querer venir a rescatar a este tipo de detenidos, por eso en esas ocasiones se colocan policías fuertemente armados y uno tiene que seguir aquí.
“Por esas razones, cuidarme para mí se ha vuelto indispensable, porque tengo una familia que me espera en casa, una familia que vive con miedo, con temor de que algo me pueda pasar, porque saben los riesgos que conlleva este trabajo”, precisó el oficial Quiroz.
Durante los cinco años que tiene trabajando en la Policía Municipal, ha visto a algunos compañeros lesionados en los reportes.
Recuerda que en una ocasión en el callejón del Manantial, él y varios preventivos fueron recibidos a pedradas por un grupo de vándalos, la agresión duró al menos una hora, el saldo fue de un oficial severamente herido de la cabeza.