Padres de familia de la escuela primaria Centenario amagaron con tomar las instalaciones si la maestra Elvira Cruces Carillo, acusada de agredir a algunos estudiantes, no es reubicada.
Tras una reunión con representantes de la delegación regional de la SEG, supervisores y docentes de la escuela, 28 papás exigieron que la maestra fuera cambiada de grupo e incluso fuera destituida, luego que presuntamente agrediera a varios niños.
En la reunión, siete padres de familia denunciaron amenazas y agresiones contra sus hijos. Dijeron que la maestra incluso amenazó a algunos niños con matar a sus padres si éstos no desistían de sus acusaciones.
“Ayer le dijo a mi hija que si no le paraba me iban a encontrar ahorcada”, reclamó una madre de familia, quien era acompañada por su hija pues tras las amenazas ya no la llevó a clase con la maestra.
Por su parte, los representantes docentes pidieron a los papás llevar el proceso administrativo hasta sus últimas consecuencias y se comprometieron a dar una solución en las próximas 72 horas.
“Ya fue demasiado, esto tiene más de un mes y ustedes sólo dan largas y la defienden”, comentó Daniel Ahuatzi Cervantes, representante de los padres de familia, quien amagó con tomar, entre hoy y mañana, las instalaciones de la escuela si no se reubicaba a la maestra.
Las autoridades docentes desconocieron las acusaciones de acoso y agresiones y aseguraron que el caso sería turnado a un consejo escolar contra la violencia; sin embargo pidieron a los padres ser pacientes.
Ahuatzi Cervantes señaló que ya interpusieron denuncias en la subprocuraduría de Derechos Humanos y levantaron un acta en el Ministerio Público, que fue directo a conciliación.
Agregó que por las recientes agresiones, los padres de familia interpondrán denuncias por amenazas y lesiones en el Ministerio Público.
Tras la reunión, padres de familia fueron al salón para sacar a sus hijos; algunos se los llevaron a casa y otros pidieron que fueran cambiados a otros salones.
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