En las comunidades cercanas a la Sierra de Santa Rosa, sus habitantes esperan un crudo invierno, en medio de fuertes carencias y la falta de atención de autoridades estatales y municipales, que en algunos casos tienen años de no atender los reclamos y necesidades de quienes ahí habitan.
Unas de estas comunidades es La Concepción, donde sus cerca de 800 habitantes, especialmente niñas, niños y adultos mayores, como ellos mismos dicen “tendrán que encerrarse en sus casas” para evitar las bajas temperaturas que terminan por enfermar a grandes y pequeños.
A pesar de las versiones oficiales de instancias municipales como Protección Civil (PC), que aseguraron que tienen comunicación constante con el delegado y algunos pobladores para enterarlos de las medidas y precauciones que se deben de tomar para mitigar el frío, los habitantes no se confían y más porque afirmaron que tienen años sin que esa dependencia llegue al lugar.
“El frío ya empezó, tiene como unas dos semanas. Aquí ya sabemos lo que nos espera con las heladas y no esperamos mucha ayuda porque tenemos años que no viene alguna autoridad”, dijo Camilo Yebra Yebra, delegado en esta localidad encavada en el área natural protegida Cuenca de la Esperanza.
En este asentamiento, situado sobre un terreno agreste donde inicia el extenso bosque de la Sierra de Santa Rosa, sus habitantes saben que les esperan temperaturas de hasta 5 grados centígrados y para los meses de enero y febrero bajarían más aún.
Además de prepararse para evitar las bajas temperaturas, se prepara para resistirlas, sin enfermarse, pues lo más común es que los más pequeños y los adultos mayores sean víctimas de bronquitis e infecciones respiratorias.
Pero lo más triste es que tendrán que curarse por sus propios medios, ya que el centro de salud que existe en el lugar no funciona de manera adecuada, pues por falta de médicos abre una vez al mes y sólo por unas horas.
Entre las múltiples carencias de estos hombres y mujeres a los que la misma naturaleza ha hecho “rudos”, la más marcada es la falta de un aparato para calentar el interior de sus hogares, que aunque son de tabique o adobe no garantizan que el frío no cale y se cuele hasta el último rincón.
Por eso tienen que usar los fogones, en donde con leña se cocinan y preparan los alimentos para brindar calor al interior de estos humildes hogares que junto con sus moradores se han tenido que adaptar a unas temperaturas que muchos de nosotros no imaginamos ni en sueños.
“Con estos nos calentamos, eso sí hay que tener buena leña para que el frío se sienta menos y mejor ni salir porque hay días enteros que se siente muy fuerte”, dijo María, una madre de familia de tres menores que se tiene que esmerar para evitar que se enfermen.
Ella como todas las madres de la comunidad sabe que viene una temporada muy complicada, en donde los niños se van a enfermar y no hay otra alternativa que cuidarse lo más que se pueda.
“Los niños son los que más se enferman, hay mucha gripe, muchas infecciones, pero qué vamos a hacer, no podemos estar así nomás, por eso los abrigamos y los tenemos en la casa”, expresó.
A estas condiciones adversas, los habitantes tienen que enfrentarse a otros problemas como la falta de servicios públicos, como es el caso de agua potable y el drenaje.
Así, en la temporada invernal, un simple fogón se convierta en la diferencia entre pasar el invierno sin enfermedades, que contagiarse de alguna de las que llegan a afectar a la mayor parte de la comunidad.
Pronostican fuertes heladas en el municipio
Por su parte, el meteorólogo Jacinto Jaramillo Hernández aseguró que con base en las últimas mediciones y pronósticos climáticos, se espera una fuerte temporada invernal en todo el territorio de la ciudad de Guanajuato, en especial en las partes altas, las serranas y las cercanas a afluentes como presas, ríos y arroyos.
Temperaturas de hasta cinco grados centígrados en promedio se habrán de sentir con más intensidad en las localidades de la Sierra de Santa Rosa, donde además se esperan heladas, la caída de agua nieve y no se descartan posibles nevadas.
“Hay condiciones de humedad que van a generar temperaturas más bajas, sobre todo en los meses de enero y febrero que es cuando se espera lo más intenso del invierno”, dijo.
Jacinto Jaramillo explicó que incluso el invierno podría prolongarse unas semanas más de lo normal, precisamente por las condiciones de humedad que dejó la intensa temporada de lluvias que recién terminó.
“En zonas altas y serranas habrá serios descensos de temperatura, sobre todo con la llegada de los frentes fríos que para esta temporada serían cerca de 50”, afirmó.
Advirtió que las corporaciones locales de socorro y auxilio deben de por lo menos informar a la población de esta situación, en especial a quienes carecen de lo más elemental y de acceso a información pronta y oportuna.
“Hay comunidades muy lejanas a donde la población no tiene acceso a la información, a ellos las autoridades deben atenderlos para que no haya motivos para lamentarnos”, expresó.
Recomendó a la población en general mantenerse al pendiente del desarrollo de la temporada invernal, ya que no sólo se esperan mañanas y noches heladas, sino días completos.