Los trabajadores que son contratados para laborar en las obras de rescate y conservación del Centro Histórico carecen de medidas de seguridad y protección para desarrollar su labor y son expuestos a ser víctimas de un accidente.
Ayer poco antes de las 12:00 horas AM Express captó a un trabajador que subió hasta lo más alto de la cúpula del templo de San Roque para pintar la estructura sin ninguna protección.
El trabajador subió hasta lo más alto de la cúpula por sus propios medios pero no se observó en todo el perímetro del templo una escalera o una colgante para asegurarse mientras trabajaba a una altura cercana a los 20 metros.
Tampoco se apreció que haya sido asegurado con una cuerda o amarre ni un cinturón para protegerlo. Esta persona fue vista pintando en la parte de los vitrales que adornan la cúpula del templo, ubicado en la zona Centro.
Al intentar recabar la versión de los encargados de la constructora, el resto de los trabajadores se limitaron a señalar que en ese momento no estaba el encargado.
No es la primera vez que los trabajadores de estas obras enfrentan situaciones que evidencian irregularidades por parte de los contratistas, pues hace unas semanas, Agustín Landeros, un habitante de la colonia Cerro del Cuarto, denunció ante medios que no les pagaron.
El afectado dijo que él junto con otros diez jóvenes originarios de ese asentamiento, fueron contratados para trabajar en las obras de rescate del Centro pero sólo recibieron 400 pesos por dos semanas laboradas, incluso los obligaron a trabajar Jueves y Viernes Santos.
Se arriesgan trabajadores en obras del centro histórico
Trabajan en lo alto del templo de San Roque sin arnés de seguridad.