La recién designada secretaria general de la Asociación Sindical de Personal Académico y Administrativo de la Universidad de Guanajuato (Aspaaug), Lizbeth Reyes Montufar, desestimó los señalamientos en su contra y aseguró contar con un amparo expedido por la justicia federal.
Reyes Montufar fue señalada por los representantes de las planillas roja y marrón, Rosa María Ortiz y Francisco González Torres, por presuntamente enfrentar denuncias civiles y penales en su contra, por lo que no podía participar en el proceso de renovación de la mesa directiva.
Fue acusada de hostigamiento, abuso laboral, robo y usurpación de funciones, cargos de los cuales en primera instancia fue eximida de responsabilidad, por la dirigente Carmen Cano Canchola.
Las denuncias supuestamente se formularon en octubre del año pasado y si bien fue absuelta por al dirigente sindical, en ese mismo año obtuvo un amparo de la justicia federal bajo el numeral 750/2014 de un juzgado de distrito del Poder Judicial de la Federación.
Incluso, durante el último trimestre de 2014 fue separada de su cargo como secretaria de organización del Comité Directivo de Aspaaug.
Lizbeth Reyes explicó que las denuncias no salieron de los órganos internos de la organización, ya que de una revisión del Consejo de Honor y Justicia se concluyo que no había elementos que acreditaran las presuntas conductas que cometió.
Niega acusaciones
Lizbeth Reyes asegura contar con un amparo federal