La candidata a secretaria general de la Asociación Sindical de Trabajadores Académicos y Administrativos de la Universidad de Guanajuato (Aspaaug), Lizbeth Reyes Montufar, anunció que hoy tomará posesión como titular del organismo, luego de que el Tribunal Contencioso y Administrativo (TCA) le otorgara la correspondiente toma de nota.
Lo anterior, pese a que apenas el pasado viernes diera a conocer que no reconoce e impugnaría el resultado de la asamblea general a la que fueron convocados los afiliados a Aspaaug, donde por acuerdo mayoritario se decidió desconocer su triunfo y reponer el proceso electoral en un periodo de tres meses.
“El martes vamos a asumir la secretaría general de Aspaaug, pues el Tribunal Contencioso y Administrativo sólo reconoce la toma de nota de la planilla azul”, dijo Reyes Montufar.
Explicó que ha decidido tomar posesión del comité ejecutivo del organismo para el periodo 2015-2019, porque el sindicato como tal no puede estar, ni permanecer sin personalidad jurídica, ya que el comité que actualmente encabeza Carmen Cano Canchola cumplió su periodo el lunes a las 12:00 de la noche.
De proceder el nombramiento de Reyes Montufar, la elección del nuevo comité que acordó la asamblea general extraordinaria quedaría en el aire.
“El comité deberá tomar protesta este martes ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, pues a la planilla azul que nosotros representamos ya le fue otorgada la toma de nota”, afirmó.
Reyes Montufar dio a conocer que una vez que se concrete su designación como nueva secretaria general de Aspaaug, iniciará los acercamientos con Carmen Cano Canchola para concretar todo lo relacionado con el proceso de entrega-recepción.
“Nosotros no vamos a hacer nada que no sea lo que nos diga y ordene el Tribunal Contencioso, lo de la entrega-recepción lo veremos en su tiempo”, aseguró.
bIntegrantes de la Aspaaug, aseguraron que el proceso para elección del nuevo comité ejecutivo ha debilitado, dividido y desgastado al organismo.
Por lo tanto, consideraron que es necesario iniciar cuanto antes un proceso de evaluación del organismo, con la finalidad de evitar un mayor debilitamiento y lograr que se mantenga fuerte y como el sindicato universitario más importante.
“Todos los problemas que se vivieron causaron mucha confusión entre los agremiados, muchos tienen dudas de seguir adelante pero lo importante es mantener la fortaleza del organismo”, dijo Rosa María Ortiz Hernández, de la planilla roja.
Explicó que además del mal momento que se vive al interior del organismo, es claro que las normas y reglamentos internos han sido rebasados por las circunstancias, por lo que la nueva dirigencia deberá trabajar arduamente en la modificación del reglamento.
“Hubo un proceso electoral muy cuestionado, en donde se llevó a cabo una asamblea manipulada e ilegal”, afirmó Lizbeth Reyes Montufar.
Ambas contendientes consideraron que de ahora en adelante lo más importante es trabajar para devolver la fortaleza al organismo, el cual es integrado por cerca de 1 mil 900 académicos, profesores y trabajadores administrativos.