Para poder ganarse unos cuantos pesos y además ayudar con el mantenimiento del acceso las Teresas-Plaza de Toros, dos niños limpian con una pala la tierra que han dejado las intensas lluvias.
Estos pequeños de entre 8 y 10 años de edad, vecinos de la zona, arriesgan su vida durante horas para tratar de sacar dinero y así comprarse lo que requieren para escuela o ayudar a su familia. A la mitad del acceso se encuentran trabajando, bajo el radiante sol y sin ninguna protección, más que la  de “echarse aguas”, cuando circulan los vehículos.
Mientras un niño limpia con la pala las piedras, lodo y tierra, el otro hermano se queda metros adelante,  vigilando cuando pase un vehículo y así hacerles la indicación de que disminuyan la velocidad porque trabajan para el bienestar de los conductores, a cambio les piden unas monedas por la labor.

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