Edwin Damián Maldonado Centeno, de 12 años, alumno de la Escuela Aguiluchos de Chapultepec, era un buen estudiante, pero el próximo lunes cuando concluya el periodo vacacional no regresará a su salón de clases, debido a que murió.
El subprocurador de Justicia Región B, Joel Romo Lozano, confirmó el deceso del menor; la necropsia indicó que la muerte del niño fue por traumatismo craneoencefálico.
“El niño murió a las 11:30 de la noche del lunes, en el Hospital Insurgentes”, expresó el funcionario.
Es decir, que no fueron las quemaduras de la descarga eléctrica que recibió, sino el golpe que sufrió al caer en el cemento de la calle.
El lunes a las 6:30 de la tarde, Edwin subió hasta el tercer piso de los departamentos en donde vivía, ubicados en la calle Ignacio López Rayón número 246, de la colonia Constitución de Apatzingán.
En la azotea de los departamentos, se encuentran unos cables, que por accidente Edwin tocó y le sobrevino una descarga.
“Fue un descuido del menor, a él le gustaba acercarse mucho a la orilla, toco unos cables de alta tensión, que provoco que el niño saliera proyectado y cayó hasta la calle” explicó el funcionario.
Ahí fue donde Edwin quedó tendido, boca a bajo y semiinconsciente.
Los vecinos llamaron a los servicios de emergencia, que la llevaron al Hospital Seguro Social donde él niño recibió atención médica.
Sin embargo personal del IMSS platicaron con los familiares de Edwin Damián externando que era mejor que el menor fuera traslado al Hospital Insurgentes, manifestándoles que ahí tenían los aparatos necesarios para atender al menor de la fractura en la cabeza.
Por lo que decidieron trasladarlo a otra clínica, ingresando a la sala de cuidados intensivos, en un estado de salud critico.
Donde horas más tarde Edwin Damián Maldonado Centeno murió lamentablemente por la fractura de cráneo.

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