Los nuevos funcionarios municipales, quienes iniciarán actividades el 10 de octubre, deben dar a conocer a la sociedad guanajuatense de manera pormenorizada su condición patrimonial, fiscal y de intereses familiares.
Lo anterior con el fin de restituir la confianza de los habitantes con las autoridades, la cual en los últimos tres trienios ha caído severamente, debido a la falta de transparencia.
“Para construir confianza es necesario transparentar las decisiones y acciones que toma el gobierno, en el caso del municipio, las del Ayuntamiento y la administración pública municipal”, dijo Silvia Álvarez Bruniellere, integrante del Observatorio Ciudadano de Guanajuato (OCG).
Explicó que los nuevos funcionarios municipales, así como el alcalde, junto con síndicos y regidores, deben hacer públicas y en los formatos del Instituto Mexicano de la Competitividad y Transparencia Mexicana, su manifestación patrimonial, carta de cumplimiento de obligaciones fiscales y la manifestación de intereses, incluidas las de tipo familiar, social y comercial.
“La ciudadanía está harta de funcionarios públicos que se auto benefician de sus cargos. No se vale hacer negocios desde los cargos públicos”, afirmó Carlos Arce Macías.
Consideró que la resistencia a dar y brindar la información pública a la que todos los habitantes de la ciudad tienen derecho, además de generar un mal comienzo para la nueva administración, evidencia una actitud negativa, basada en la opacidad.

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