Toda su vida buscó una oportunidad para entrar a trabajar a la Policía Municipal hasta que logró hacer realidad su sueño.
Desde niño el oficial Ramos quiso portar el uniforme de la Policía porque todos los días veía a sus tíos salir a trabajar como oficiales de Tránsito del Estado.
Ahora tiene 1 año y ocho meses vistiendo el uniforme de la Policía Preventiva. Empezó a pie vigilando las calles y poco a poco sus superiores le fueron asignando nuevas tareas, incluso ha sido escolta de comandantes y patrullero.
“Toda la vida me llamó la atención ser parte de alguna corporación porque miraba como mis tíos trabajaban en Tránsito del Estado”.
“Durante años estuve buscando una oportunidad para entrar a trabajar, hasta que un día varios amigos y yo entregamos nuevamente los documentos, realizamos el examen de Control y Confianza y año y medio después me llamaron, fui el único elegido para entrar a la corporación”.
Le toca balacera
A pesar del poco tiempo portando el uniforme de la Policía Preventiva, le ha tocado atender reportes peligrosos, el que más recuerda ocurrió el año pasado: un grupo de hombres armados asaltaron un camión de pasajeros que iba a Dolores Hidalgo.
En ese momento trabajaba con un primer oficial en una patrulla y los dos tuvieron que apoyar al resto de los compañeros que participaban en un enfrentamiento a balazos, el cual terminó con un delincuente muerto y cinco detenidos.
En otra ocasión, el oficial conducía la patrulla y al pasar cerca del Mercado Hidalgo vio que dos hombres asaltaban a una mujer y pretendían escapar.
El oficial bajó de la unidad, corrió tras los delincuentes hasta que los alcanzó y detuvo.
“Lo más bonito de este trabajo es que puedes ayudar a la gente, y cuando te lo agradecen porque saben que te arriesgaste para cumplir con el trabajo es una satisfacción personal; cuando haces bien el trabajo y cuando la gente te da las gracias”.