Desde varias décadas atrás, la educación pública de nuestro país ha ido minimizando la importancia formativa de la educación musical. Cada vez hay menos tiempo curricular dedicado al aprendizaje de los abecedarios de la interpretación, la creación y la apreciación musical, y esto ha ocasionado que varias generaciones de mexicanos hayan carecido de los rudimentos esenciales para desarrollar mejor su sensibilidad, lo cual no es un asunto m,enor, , ya que la música, al igual que la danza, la pintura, el teatro, la escultura y la mímica, ofrecen opciones para que los estudiantes, desde temprana edad, hagan crecer la gama y los niveles de su expresión emocional y de su sensibilidad artística. ¿Por qué es importante la educación musical? Porque entre más desarrollado esté nuestro corazón, tendremos más posibilidades no sólo de ser más creativos en cualquier otra actividad, sino que, tendremos más y mejores momentos felices en la vida. Como no hay una buena educación musical en las escuelas públicas, los niños, que después serán jóvenes y adultos consumidores de música, achatarán y verán deformado su gusto musical, y les será muy difícil apreciar o crear música más diversa y de mayor complejidad. Si a lo anterior le añadimos la degradada oferta musical que mayoritariamente se ofrece en los medios, se habrá completado la chatarrización de las experienciasmusicales de muchísimos mexicanos. ¿Qué se podría hacer para mejorar la educación musical? Habría que insistir en que la educación musical pública diversa y rica sea una obligación para el gobierno proporcionarla, lo cual implicaria que, parte de los horarios escolares, o incluso en el recreo, fueran aprovechados para propagar selecciones de buena música, tanto popular como orquestal, y no sólo mexicana sino de otros países, con lo cual se ganaría muchísimo. Por ejemplo, en preescolar y primaria podría escucharse a Cri Cri, que tiene composiciones en las cuales es posible oír géneros musicales diversos (polka, tango, ranchera, country) y música emblemática de varios países (cubana, rusa, china, argentina). Además, es fundamental que se presione a los medios, radio y televisión, para que incluyan en su programación música de mejor calidad, para lo cual podría extenderse la función del ombudsman de los medios a la vigilancia y la tutela del gusto musical de las audiencias, hoy tan imparablemente rebajado. Pienso que, por ley, debería obligarse a las cadenas radiodifusoras a poner buena música en un pequeño pero significtativo porcentaje de su tiempo, a la manera del tiempo obligatorio que por ley deben ceder a los nefastos partidos políticos. Algo más que se podría hacer, es poner música de buena calidad en nuestras casas para que la escuchen nuestros hijos, y ofgrecerles, así, opciones de degustación musical, con lo cual se impactaría el desarrollo de su apreciación musical, pero, también, se puede trabajar, y de manera divertida, la creatividad musical, comprándole a nuestros hijos instrumentos musicales, a la manera de juguetes a explorar. Pasar el rato en familia, cantando y tocando cazuelas de peltre y chiflando, son opciones baratas y viables. Hay que acordarse de que todos, al menos en una pequeña cantidad porque nuestros corazones laten a cierto ritmo, llevamos la música por dentro.
Nuestra educación musical
¿Por qué es importante la educación musical?