León.- Una luna brillante como elegida para esa noche, reflejada en el agua del Foro del Lago, fue la primera imagen que los seguidores de Lacrimosa vieron al llegar a su concierto del sábado.
La espera para verlos por primera vez en León terminó con su Time Travel World Tour, que ha llevado a la banda de metal gótico por varias partes del mundo y a lugares en México nunca antes visitados.
Toda el área destinada para el público se tiñó de negro con las 2068 personas (dato de organizadores) que quisieron ser parte de dos horas cobijadas con lo mejor de los casi treinta años de trayectoria musical del dúo.
A las 8:12 de la noche, el intro en la pantalla central atrajo la atención de todos aquellos con sus vestuarios teatrales, como sacados de otras épocas; o los que llevaban prendas de piel y terciopelo, cadenas y cabelleras largas.
Tras unos minutos, cuatro músicos arribaron al escenario, seguidos por las elegantes figuras de Anne Nurmi y Tilo Wolff, quienes hicieron que los gritos sonaran con fuerza.
La lírica de “Ich Bin Der Brennende komet” dio inicio oficialmente al concierto, seguida de “Lichtgestalt”, cuyo video se proyectaba detrás del cantante.
Foto: José Antonio Castro
“Gracias. Buenas noches”, dijo Wolff en español, para emoción de todos y continuó en inglés: “Es un gusto estar por primera vez aquí con ustedes en el Foro del Lago de León”.
Pero no hacía falta mucho dominio del idioma para atrapar al público, ni de éste para cantar los temas en alemán. Cada movimiento del artista y los coros de sus canciones eran seguidos atentamente por los presentes.
La agrupación germano-suiza demostró que suena como ninguna otra desde su origen y que la magia se ha vuelto atemporal en sus voces.
La melancolía en las letras de “Nach dem Sturm”, “Schakal”, “Not every pain hurts”, “Der morgen danach” y “Alleine zu zweit” siguieron en el set list elegido.
Otra cosa característica de Lacrimosa son las imágenes en blanco y negro dibujadas lápiz que aparecen en el arte de sus discos, así como el famoso logo con el payaso, y ahí estuvieron: al fondo del escenario, intermitentes.
También se apreciaron imágenes que remiten a galaxias lejanas y momentos solitarios al ritmo de “Satura”, “Bresso”, “Seele in not”, “Die Unbekannte farbe” y “My pain”.
Muchas Gracias @LacrimosaBand por la gran noche que pudimos vivir en León Guanajuato México.
Thank you very much @LacrimosaBand for the great night we could live in Leon Guanajuato Mexico.#México #León #nikon #photography #Lacrimosa #LacrimosaenLeón #MasRuidoRock pic.twitter.com/6QgLPRnhlv Angelklavier (@Angelklavier) 24 de marzo de 2019
Pero sin duda, el clímax llegó con “Durch nacht und flut”, cuya estrofa en español hizo que todos cantaran mientras ondulaban pañuelos blancos y Wolff los guiaba con ademanes cual director de orquesta.
Un electrocardiograma en la pantalla imitaba los latidos unidos en ese momento. La emoción dio paso a más con “Stolzes herz” y “Ich verlasse heut dein herz”.
Una salida en falso de la banda se olvidó de inmediato cuando el cantante anunció que interpretarían su nueva canción “Im schatten der sonne”.
Tras “Thunder & lightning” y “Feuer” las siluetas que recuerdan al expresionismo alemán se despieron nuevamente, incluso Nurmi dijo en español “muchas gracias, buenas noches” y salió del escenario.
Sin embargo, no era suficiente para el público que los pedía de vuelta y fue entonces que Wolff quiso atesorar el momento, así que dijo a su audiencia que tomaría un par de fotos para las redes sociales de Lacrimosa, en donde han documentado esta exitosa gira.
Cuando los acordes de la canción más solicitada llegaron, hubo otro detonante de euforia: “Copycat”.
El cierre fue con “Alles lüge” y un acercamiento de Wolff al puente que une al escenario con el público, que se lanzó para tocar al artista también.
A las 10:22 de la noche finalizó el encantamiento del que hasta Mozart -de cuya pieza musical tomaron el nombre- estaría satisfecho.