Hace unos años un político hidalguense que finalizaba su periodo como diputado se me acercó para agradecer la difusión que le di periodísticamente durante el tiempo que duró la legislatura.
Entre sus palabras, me pidió que “no lo olvidara” ahora que entregará la encomienda y agregó que cuando pudiera le sacara una nota, incluso negativa, pero que hablara de él. Esto último me llamó la atención. Pensé: ¿quién en su sano juicio quiere que le tire un periodicazo (como decimos en el argot periodístico)?
Sus palabras pasaron inadvertidas por mucho tiempo. No le tomé importancia hasta que entendí el papel que juegan los medios de comunicación para mantener y dar fuerza a escenarios sociales, políticos, económicos, deportivos, religiosos y de espectáculos, utilizando nuestra energía creativa.
SOMOS DIOSES EN POTENCIA
Antes de continuar esta vivencia, te invito a que sientas, pienses y reflexiones esto: Más allá de ser servidores públicos, políticos, empresarios, trabajadores, ciudadanos… somos seres de luz proyectando a cada instante energía creativa (pensamiento, sentimiento y emoción) para ir moldeando nuestras experiencias y la realidad que vivimos.
Nos han dicho que somos hijos e hijas de “un creador” o que “fuimos hechos a imagen y semejanza de un Dios”; es decir, poseemos esa característica divina de crear. Disciérnelo tú mismo en este momento: ¿Qué pensaste cuando despertaste hoy?; la mayoría enfoca su pensamiento, sentimiento y emoción para trazar los planes del día.
Es así que toda institución, objeto, edificación o invento es la creación divina a través de la intervención consciente o inconsciente del ser humano. Esta creación parte del pensamiento, que se transforma en sentimiento y luego en emoción; estos tres elementos etéreos hacen que se precipite una realidad proyectada por la entidad divina, que eres tú y que soy yo.
Una vez descrito lo anterior, quiero decirte que los pensamientos conjuntados o enfocados en algo o alguien le DAN FUERZA. A esto se le conoce como CONSCIENCIA COLECTIVA: cuando una serie de pensamientos son evocados en algo o en alguien.
Como periodista y comunicólogo he sido testigo de cómo se utiliza esta energía creativa de manera consciente e inconsciente, a través de los medios de comunicación para influir en la creación de realidades, posicionar campañas electorales, políticas, gobernantes, ensalzar artistas, religiosos, deportistas, etcétera.
El periodismo sigue cimentado en buscar, señalar y dividir a través de noticias, la gran mayoría negativas. Aparentemente al leer, escuchar o ver la información nos hacen creer que nos estamos informando y haciendo conscientes de la realidad y, con base en la exigencia, podremos cambiar las noticias negativas; sin embargo, también ocurre lo contrario, es decir, ayudamos a mantener esas realidades.
Desde mi experiencia y la de muchas otras personas, lo que ocurre al observar noticias de este tipo por la mañana, tarde o noche (además de sentir desesperanza por la realidad) se contribuye a preservar precisamente esa realidad que beneficia a un grupo “elite” que se ha encargado de dominar durante miles de años a los seres humanos, extrayendo la energía desde el miedo, estrés y desaliento que infunden y que les sirve de alimento. Este tema lo abordaré en otra ocasión.
LA CARRERA DE UN POLÍTICO, ARTISTA O DEPORTISTA SE DESPLOMA CUANDO PIERDE SEGUIDORES
Somos como cajas de resonancia. Al momento que prestamos nuestra atención en una noticia o mensaje de cualquier tipo, emanamos energía creativa que contribuye a que esa circunstancia prevalezca. Incluso da poder a religiosos, artistas, deportistas, gobernantes, partidos políticos hasta problemas sociales como la violencia y el narcotráfico.
Cuando se deja de hablar de algún político, gobernante, artista o deportista, simplemente su carrera se desploma, pues el poder colectivo que lo ha sostenido, sus seguidores, lo abandonan.
Es por ello que en tiempos electorales, como el que concluyó hace unas semanas, los candidatos al cargo popular buscan acaparar el mayor número de espacios en medios de comunicación (como en televisión, radio, periódicos impresos y digitales), lonas, espectaculares, para que un número importante de personas hablen de ellos y, más allá de que crean en sus proyectos, les den esa fuerza que los sostenga.
El próximo viernes abundaré más en este tema y en cómo transformar, desde una visión del corazón, nuestra realidad colectiva…