Después de dos años de haber iniciado una nueva vida con su mujer y dos hijos, la madrugada de ayer un joven falleció de un impacto de bala tras participar en una riña campal en el barrio de su infancia.
La víctima resultó herida en una pelea entre “Los Sureños” y “Los Patrones” y murió en la casa de una vecina.
El hecho ocurrió a las 3:45 de la madrugada de ayer en la calle Patrón de la Música en la colonia Santa Cecilia.
La riña
A las 8 de la noche del sábado, José Luis Morúa Ávalos, de 24 años, llegó solo de visita a la casa de sus papás.
“Llegó como a las 8 de la noche, entró a la casa, pero se quedó un rato, no mucho rato, y luego ya no lo vi, se salió dizque con sus amigos ‘Los Patrones’.
“Ya en la madrugada una vecina nos fue a tocar y nos dijo que estaba en su casa muerto”, narró la mamá mientras esperaba el cuerpo de su hijo en las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo).
Según sus familiares, José Luis ya no participaba en disputas, pero la noche del sábado se vio involucrado en una riña campal contra “Los Sureños”.
En la gresca el joven resultó herido por un impacto de bala; intentó llegar a su casa, pero pidió auxilio en la vivienda marcada con el número 220 de la calle Patrón de la Música.
La propietaria del hogar abrió la puerta de su casa y el lesionado entró, pero perdió el equilibrio y se desvaneció entre la sala y una recámara.
Los habitantes de la casa llamaron de inmediato a la Cabina de Emergencia (066).
Elementos de la Policía Municipal llegaron al lugar, y los rijosos comenzaron a dispersarse, por lo que no se logró la captura del agresor.
Paramédicos de la Cruz Roja acudieron a la casa donde se encontraba el lesionado e intentaron auxiliarlo, pero ya no presentaba signos vitales.
Autoridades dijeron que si la víctima no se hubiera agitado al correr, podría haber sido trasladado con vida al hospital.
Agentes del Ministerio Público no localizaron casquillos percutidos en la escena del crimen.
El dictamen de la necropsia señaló que la víctima falleció de una herida en el pecho producida por arma de fuego.
Esperan cuerpo
A las 6 de la mañana del domingo, Jesús Morúa, padre del fallecido, acompañado de su esposa, acudió a declarar ante el Ministerio Público.
A las 10 de la mañana aún no recibían el cuerpo de su hijo.
El cuerpo de José Luis había sido trasladado al Hospital General Regional para practicarle unas placas y localizar la bala que le quitó la vida.
José Luis Morúa Ávalos era el séptimo de ocho hermanos y trabajaba como albañil en una obra en construcción.
Dejó a un hijo de 2 años y a una pequeña de un año.
Tenía dos años y medio de haberse mudado a la colonia Valle Hermoso, de donde son originarios los integrantes de la pandilla que al parecer lo asesinaron: “Los Sureños de Valle Hermoso”.
“Yo no le sabía de pleitos, sí se juntaba con pandilleros y lo veíamos peleando con otros muchachos, pero no sé qué pudo pasar para que me lo mataran”, dijo la mamá del joven mientras se limpiaba las lágrimas y salía del Ministerio Público.

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