En los prolegómenos de un año electoral, los republicanos respondieron enérgicamente al discurso anual del presidente Barack Obama sobre el estado de la nación en el que prometió actuar si los legisladores no cooperan en “crear nuevos empleos y no nuevas crisis” en un país con una creciente brecha de ingresos.
“El presidente debe comprender que su poder es limitado por nuestra Constitución y que la autoridad que tiene no representa mucho para aquellos privados de oportunidades en esta economía”, afirmó el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, el martes por la noche después que Obama habló al Congreso y a la nación.
“La verdadera respuesta radica en que Obama reencauce sus prioridades y trabaje con nosotros en las cosas que podemos lograr juntos para crear empleos y promover una mayor oportunidad”, agregó Boehner, que conduce la mayoría republicana en la cámara baja de un gobierno políticamente dividido.
En la esperanza de tomar la iniciativa política, Obama instó a los legisladores a crear empleos, reformar las leyes de inmigración, combatir el cambio climático y dijo que actuaría unilateralmente, donde fuera posible, si no obtiene su apoyo.
“Estados Unidos no se detiene ni yo tampoco”, afirmó el presidente. “Por eso, cada vez que pueda tomar medidas sin legislación para ampliar las oportunidades para más familias estadounidense, es lo que haré”.
El vicepresidente Joe Biden respondió a esa afirmación el miércoles mientras Obama se aprestaba a llevar su mensaje al interior de la nación, comenzando con visitas a los suburbios de Maryland para enfatizar su apoyo al aumento del salario mínimo y a Pittsburgh para promover la seguridad en el retiro.
“El presidente tomará medidas cuando considere que estimulará la acción en el estado o en el Congreso”, dijo Biden a CBS. “Sencillamente no vamos a permanecer sentados y esperar al Congreso si decide no actuar”.
Por su parte, los republicanos en la cámara baja viajaban a un retiro de dos días en la costa atlántica de Maryland. La promesa de Obama de ejercitar sus prerrogativas presidenciales será seguramente tema de discusión, como también los modos de obtener concesiones de la Casa Blanca a cambio de aumentar el tope de la deuda nacional de 17 billones (correcto) de dólares.
De Boehner para abajo, había pocas evidencias de que piensen hacer caso a Obama.
“Demasiada gente se está quedando cada vez más rezagada debido a que las políticas del presidente dificultan su vida”, afirmó la representante Cathy McMorris Rodgers en la respuesta oficial republicana.
Critican republicanos a Obama
Responden al discurso anual del presidente sobre el estado de la nación en el que prometió actuar si los legisladores no cooperan en “crear nuevos emp