Tras ocho semanas continuas de descenso en el registro de contagios, casos activos y fallecimientos por COVID en la región de Tulancingo, desde hace dos semanas se presenta una meseta.
Lo anterior representa riesgo de un nuevo pico de incidencia biosanitaria, por lo que el secretario de Salud en Hidalgo, Alejandro Efraín Benítez Herrera llama a la población a mantener las medidas preventivas.
Durante la sesión del Consejo Jurisdiccional de Vigilancia Epidemiológica (Cojuve), ayer viernes 5 de noviembre, externó preocupación por las fiestas de fin de año, que puedan significar repunte de casos.
La condición de meseta significa que la incidencia de contagios se ha detenido, pero no baja ya y los próximos festejos pueden ser factor de contagio, sobre todo aglomeración de personas y relajamiento.
Llamó a la población en general a no confiarse y seguir con las medidas preventivas, mientras que a las autoridades municipales de la región las exhortó para que estas se cumplan puntual y adecuadamente.
Hemos tenido en meses anteriores brotes de contagios que incluso han afectado a familias completas; esta época del año es complicada, tenemos que seguir acatando las medidas preventivas e incluso reforzarlas para evitar un escenario como el que tuvimos el año pasado con el repunte de contagios”.
Dentro de la sesión del Cojuve, Benítez Herrera señaló que de los municipios de esta jurisdicción sanitaria, Cuautepec, Santiago Tulantepec, Singuilucan y Tulancingo, éste tiene el más alto porcentaje de población vacunada contra COVID en toda la entidad, con 80 por ciento de la población objetivo.