El retraso en la entrega del puente atirantado de Pachuca se debió a la pandemia por COVID-19 y al aumento en el precio del acero debido al cierre de empresas del rubro, aseguró el titular de SOPOT, José Meneses Arrieta.
El titular de la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (SOPOT) detalló que el retraso y el alza en el presupuesto para el puente atirantado se deben a que la pandemia ocasionó que muchas empresas acereras cerraran y por ello el material incrementó sus costos.
Cabe recordar que en un inicio la inversión prevista para la obra era de 415 millones de pesos, pero debido a lo anterior se incrementó para quedar en 502 millones de pesos, lo que da una diferencia de 87 millones. Meneses Arrieta mencionó que la obra estará terminada en su totalidad la primera quincena de enero.
El puente que forma parte de la Supervía Colosio estaba programado para terminarse en septiembre del presente año, pero el secretario de Obras comentó que incluso hubo contagios de coronavirus entre los soldadores, lo que obligó a parar la obra momentáneamente, lo que prolongó el tiempo de ejecución.
La obra consta de cuatro mástiles con una altura de más de 60 metros con cimentación de 30 metros de profundidad, lo que les permite soportar mil 500 toneladas a cada uno; además, tiene 32 trabes de acero estructural y 48 tirantes que sostendrán la loza de concreto asfáltico a lo largo de sus 200 metros de longitud.
Otro factor que contribuyó al retraso, añadió, fue el clima de la capital hidalguense que afectó el proceso de soldadura especial que necesitan los tirantes, que con agua o viento reciben un tratamiento diferente por parte de los soldadores especializados, indicó.
ALZA EN PRECIO DE LOS MATERIALES
En un inicio, mencionó el secretario de Obras Públicas, toda la obra del puente y la restauración de la glorieta tenían un costo de 415 millones de pesos, pero debido al alto precio en el acero y diversos materiales que detonó la pandemia por coronavirus, se elevó a 502 millones.
La licitación ganadora fue de 415 millones de pesos, pero debido a la pandemia que mantuvo cerradas algunas empresas acereras y el incremento de su costo en más de 200 por ciento, causó que tuviéramos que aumentar aproximadamente 80 millones para cubrir la falta de material y sobre todo acero para culminar la obra”, explicó.
De igual manera se detalló todos los estudios realizados por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), así como de otros laboratorios internacionales que dan certidumbre para evitar cualquier tipo de percance natural en el puente, ya sea causado por el viento o por inundaciones que son frecuentes en la zona.
Lo anterior garantiza que de Ciudad del Conocimiento, ubicada en la salida a Actopan, al corredor de la montaña, los automovilistas harán un tiempo aproximado de 17 minutos, lo cual anteriormente era un recorrido mucho más tardado pues atraviesa zonas de gran afluencia vehicular.
CONCLUIRÁN OBRA EN ENERO
Al abrir la circulación vehicular en el puente atirantado el 30 de noviembre, a la par comenzarán los trabajos de restauración de la glorieta 24 horas, donde se instalarán semáforos peatonales además de una planeación estratégica para mejorar la circulación de automóviles.
Las obras de la glorieta ya están incluidas en los 502 millones de pesos de inversión y estarán terminadas a principios de enero, refirió Meneses Arrieta.
NO RENUNCIARÁ AL CARGO
A inicios de septiembre, el gobernador Omar Fayad Meneses, durante el informe de gobierno del alcalde de Tulancingo Jorge Márquez, declaró que si Meneses Arrieta no entregaba la obra terminada a finales de dicho mes sería separado del cargo.
Lo platicamos y lo que nos decía el gobernador es que la calidad y la seguridad del puente no está por encima del tiempo, también nos dijo que nos tardáramos lo que fuera necesario pero que hiciéramos una obra de calidad y muy segura para los hidalguenses”, comentó el secretario al ser cuestionado sobre si le pidieron su renuncia como se mencionó anteriormente.