León, Guanajuato.- “Tuve experiencias fuertes con el COVID, perdí amigos y colegas en la primera ola, al principio fue difícil”, explicó Francisco de la Garza, profesor de la UNAM Campus Guanajuato.
Aseguró que está tranquilo de volver a clases con la aplicación del refuerzo de Moderna, que le aplicaron en el centro comercial Mulza durante la segunda jormada de vacunación para personal educativo.
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El tiempo de espera es de máximo 40 minutos en el punto de vacunación, pero puede ser hasta de 20.
Los maestros saben que no deben ser un foco de infección para los alumnos.
“Se está postergando el regreso, no lo confirman por estacionalidad y por contagios, pero la responsabilidad es nuestra”, aseguró el profesor.
Sandra Lona ya padeció COVID, fue de las primeras en la entidad.
Yo tuve COVID el año pasado, me fue bien, algo leve, pero sí había preocupación porque fui de las primeras, afortunadamente fue leve. Posiblemente en compras de supermercado me contagié, no salíamos a nada y creo que fue en esa parte”, dijo Sandra, quien es parte del personal administrativo de la Universidad de Guanajuato.
“Es importante que nos pongamos el refuerzo, regresaremos a laborar. Ya el 24 enero regresan a la prepa en León, hay que poner el práctica la conciencia y llevar las medidas que no se llevan a cabo y quitar las obsoletas”, aseguró Sandra.
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Apurada por su vacuna, Hilda Hernández pensó que se tardaría mucho, pero tras 30 minutos de espera y unos segundos de aplicación, pudo estar más tranquila.
La vacuna abona para no ser foco de contagio porque es muy feo y te sientes impotente por el COVID, mis papás murieron y fue triste, así me di cuenta de que la enfermedad existe”, dijo la maestra.
La mayoría del personal docente acudió por la vacuna en horario laboral, y tras la aplicación regresaría a su centro de trabajo.
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