La temporada de altas temperaturas se avecina y cada vez son más frecuentes las olas de calor en México. Es por ello que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) informaron sobre sus efectos adversos en la salud humana y recomendaron tomar medidas para enfrentar estos fenómenos meteorológicos.
La OPS reportó que en el verano de 2018 y de 2019 Argentina, Brasil, Chile, Perú, Paraguay, Uruguay y México se vieron afectados por las olas de calor, un evento que nunca antes había sucedido en la región.
Si bien las olas de calor no son una amenaza tan destructiva como un huracán o una inundación, pueden causar la muerte. En México, en 2018 ocurrieron 26 fallecimientos asociados a las olas de calor pues ese año se registraron temperaturas de hasta 45 grados en algunos estados que usualmente no se registraban como es el caso de Hidalgo.
¿Qué es una ola de calor?
Según la OMS y la Organización Mundial de Meteorología (OMM), una ola de calor es “un periodo inusualmente caliente, seco o húmedo, de día o de noche, que se inicia y termina de forma abrupta, con una duración de por lo menos dos días a tres días, con un impacto discernible en los seres humanos y los sistemas naturales”.
En los últimos años, la OMM ha observado un aumento en la frecuencia, duración y magnitud de las olas de calor; uno de los factores involucrados en este fenómeno es el cambio climático.
¿Cómo afecta una ola de calor a la salud?
Dado que en cada región los umbrales de temperatura son distintos en cada región del mundo, los efectos en la salud de las olas de calor también varían de acuerdo a cada lugar. No obstante, la OMS y la OPS han identificado ciertos patrones de afectación constantes como los siguientes:
- Edemas (hinchazón)
- La sudoración excesiva, que puede llegar a dos litros por hora, ocasiona la pérdida masiva de líquidos y electrolitos
- Desmayos
- Deshidratación severa
- Calambres
- Agotamiento por calor
- Un golpe de calor que puede llevar a la muerte
- Accidentes cerebrovasculares
- Formación de coágulos
Las muertes y hospitalizaciones por esta causa ocurren muy rápido, generalmente el mismo día; no obstante, estos organismos señalan que pocas muertes son causadas directamente por el calor, pues la mayoría se debe a un agravamiento de enfermedades cardiopulmonares, renales, y psiquiátricas.
Las olas de calor también afectan indirectamente a la salud, ya que con las altas temperaturas las bacterias proliferan más rápido y producen toxinas que pueden contaminar el agua o los alimentos y generar gastroenteritis.
Asimismo, se incrementa la velocidad de eclosión de los huevos y larvas, lo que según la OMS hace que los mosquitos sean más agresivos incrementando la transmisión de enfermedades por esta vía.
¿Qué medidas debo tomar para protegerme de las olas de calor?
Ciro Ugarte, Director del departamento de emergencias de salud de la OPS, emitió las siguientes recomendaciones para que las personas puedan protegerse de las olas de calor:
- Estar atentas a los mensajes de las autoridades locales que advierten sobre los fenómenos meteorológicos
- Mantenerse en un lugar fresco
- Beber líquidos al menos cada dos horas, aun sin tener sed
- No realizar actividades físicas fuertes durante las horas en las que haga más calor que usualmente son por la tarde
- No exponerse a los rayos de sol directo en las horas de más calor
- Las personas con enfermedades crónicas y personas con discapacidad consultar con su médico si los medicamentos que están tomando no tienen ninguna reacción adversa con el calor.
En ese sentido, advirtió que los grupos más vulnerables a las olas de calor son los niños, los adultos mayores, personas con enfermedades crónicas, personas con discapacidad y personas en extrema pobreza que no cuentan con los medios necesarios para tomar medidas de protección y no tienen acceso a las instituciones de salud.
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