La Auditoría Superior de la Federación reportó que de los 4 mil 975 millones de pesos destinados en 2012 para el equipamiento de aulas con tecnología, se emplearon más de 502.4 millones de pesos en asesorías.
De ese modo, los fondos para tecnología educativa no sólo se redujeron ese año, sino que lo ejercido se utilizó en el pago de contratos gestionados por la Subsecretaría de Educación Básica, cuyo titular era Francisco Ciscomani.
Ese año el programa Habilidades Digitales para Todos obtuvo mil 800 millones de pesos, de los cuales 500 millones fueron empleados en asesorías.
En el caso del proyecto Aula Base Telemática se aprobaron 3 mil 175 millones de pesos para volver a equipar salones de quinto y sexto de primaria con pizarrones electrónicos, proyectores y computadora para el maestro, sin embargo ese fondo se canceló y sólo se emplearon 2.4 millones, también en asesorías.
Asimismo, se extendieron los contratos de los equipos de Enciclomedia por un año más, pese a que se trataba de equipos con siete años de uso. Por esos convenios la SEP erogó mil 32 millones de pesos.
En relación a los contratos de asesorías, la Auditoría Superior de la Federación señaló en su informe de la Cuenta Pública 2012, que la SEP no solicitó que se acreditara documentalmente los insumos cubiertos.
Por ejemplo, en el caso de capacitaciones no hay listas de asistencia firmadas ni constancias de capacitación o resultados de evaluaciones, mientras que en la aplicación de pruebas piloto no se solicitaron firmas o sellos de escuelas para comprobar su aplicación, así como sus resultados.
En el reporte de auditorías, también se establece que la SEP no realizó investigaciones de mercado para motivar una adjudicación de los contratos de asesoría y las licitaciones no se realizaron a través de una convocatoria abierta y pública.
“Se adjudicaron de manera directa 474 millones 267 mil 800 pesos, sin haber realizado las investigaciones de mercado que garantizaran las mejores condiciones para el Estado, en cuanto a cantidad, calidad, oportunidad y precio, de los procesos de contratación”, describió la ASF.
Por ello solicitó la intervención del órgano interno de control para fincar responsabilidades administrativas.
“La Auditoría Superior de la Federación considera que la Secretaría de Educación Pública no cumplió con el objetivo en materia de equipamiento de escuelas públicas de educación básica con tecnologías de la información y la comunicación para apoyar el aprendizaje y favorecer el desarrollo de habilidades digitales de los estudiantes”, resumió el organismo.
Cuestionan Escuelas de Tiempo Completo
La SEP destinó 2 mil 500 millones de pesos al Programa de Escuelas de Tiempo Completo, pero los alumnos no mejoraron su desempeño escolar, concluyó la ASF.
La auditoría reveló que los recursos se entregaron sin establecer criterios ni horarios para ampliar la jornada escolar y sin que se contará con una propuesta pedagógica.
Incluso muchas de las escuelas beneficiadas con el programa también recibieron recursos de otros programas federales.
“Al analizar los resultados de las pruebas para comparar promedios entre escuelas beneficiadas y no beneficiadas por nivel educativo, se observó que en las asignaturas de matemáticas y español en primaria no hay evidencia que sugiera que el programa está influyendo en el logro educativo de los alumnos.
“En secundaria, en la asignatura de matemáticas, el logro es menor que el resultado obtenido en las escuelas no beneficiadas, y en español es mayor que el logro educativo de las escuelas no beneficiadas”, se reportó en el informe.