León, Guanajuato.- Luego de dos años de que fueron canceladas las procesiones de Semana Santa debido a la pandemia por el COVID, las calles de varios barrios de la ciudad revivieron el tradicional viacrucis de cada Viernes Santo.
En el barrio del Coecillo, rostros afligidos, miradas de esperanza y feligreses de rodillas, invadieron el atrio del templo de San Francisco de Asís durante el viacrucis, que este año adaptó su recorrido en el jardín del barrio.
Luego de dos años de ausencia, una gran multitud acudió para ser partícipes de una tradición que por años ha unido a los habitantes del Coecillo y vecinos de colonias aledañas, quienes eligen este cuadro de la judea por ser uno de los más comprometidos con la fe y adoración a Cristo.

Ni el clima o el reducido espacio fueron impedimento para que los asistentes permanecieran hasta el final de la representación, que minuto a minuto logró tocar el corazón de los feligreses, quienes se conmovieron con la actuación de un Cristo joven.
Entre las escenas que más impactaron a los asistentes se encontró la representada en la sexta estación, donde Verónica limpia el rostro de Jesús, ya que el rostro marcado en el lienzo de tela, correspondía al rostro del actor, dándole a la escena un toque muy especial.

La vía dolorosa estuvo acompañada de oraciones, cánticos y reflexiones que se leyeron en cada una de las 14 estaciones que comprende el tradicional viacrucis.
La representación de las tres caídas comenzó poco antes de las 10 de la mañana y concluyó a las doce del mediodía, para finalmente dar lectura a las siete palabras.
Devoción infantil
Con alegría y mucha emoción, los niños y niñas del grupo de teatro infantil “5 llagas de San Francisco” del barrio del Coecillo, llevaron a cabo su primera presentación de la pasión y muerte de Jesús.

Al grito de tercera llamada fue que dio inicio el viacrucis en el atrio del templo de San Francisco de Asís, con la representación del juicio y sentencia a Jesús, luego los niños recorrieron el jardín del barrio, para que Leo Jeremy, quien interpretó a Cristo, cargara la pesada cruz.
El cuadro de la Judea infantil estuvo integrado por más de 50 niños y niñas.
AM