Se llama Eduardo

La comunidad cristiana se llenó de alegría al ser testigos del bautizo del pequeño Eduardo De la Rosa Lorenzini.
En la puerta de la parroquia de Santa Margarita, Eduardo De la Rosa y Victoria Lorenzini, fueron recibidos por el párroco en esta importante fecha en la que su heredero se convirtió en nuevo integrante de la iglesia católica.
Antes de ingresar al altar de Dios, el menor Eduardo fue marcado con la señal de la cruz.
El esperado encuentro llegó al ver como Eduardo fue bañado con el agua bautismal que lo convirtió en hijo de Dios.
En tan importante acontecimiento, los señores De la Rosa Lorenzini decidieron invitar a María José Alfaro, José Luis Cossio, Miguel Ángel Lorenzini y Mónica De la Rosa, a participar como padrinos de su heredero.
Luego de la ceremonia bautismal, los asistentes al bautizo de Eduardo se trasladaron al área del bosque del Club Campestre, lugar que se eligió para disfrutar de una amena tarde de convivencia.
En la reunión, Eduardo y Victoria agradecieron a sus seres queridos por acompañarlos en esta memorable celebración en honor a su primogénito.