Un vendedor de chocolates dejó desamparados a su esposa y tres hijos tras morir ahogado en el canal de Coria, al sur de Irapuato donde supuestamente echaba carreras nadando.
La tragedia ocurrió ayer alrededor de las 3:30 de la tarde, a la altura de la colonia La Lupita, a tan sólo unos 80 metros del bulevar Mariano J. García.
Comió con su familia
El humilde comerciante Óscar Hernández Ramos, de 31 años, apodado “El Chore”, regresó después de atender su puesto ubicado en la Zona Centro, sobre la calle Leandro Valle.
El joven regresó a casa, en una vecindad ubicada sobre la calle Axotla, de la misma colonia La Lupita, en donde ya lo esperaban para comer su esposa y sus tres hijos de 6, 4 y 3 años.
Luego, se salió con su amigo Jonathan, alias “El Jony”, pero según elementos de la Policía Municipal y vecinos del fallecido, media hora antes de la tragedia, ambos andaban aparentemente en estado inconveniente, tras el influjo de sustancias prohibidas y alcohol.
Echaba carreritas
“Estaban echando carreritas de un lado a otro del canal, nadando entre el agua, me imagino para ver quién ganaba”.
“Yo entré a mi casa, pero a los pocos minutos volví a salir, pues escuchaba que todo mundo gritaba; era uno de ellos, ya se había ahogado”, relató una vecina.
Entre el juego, “El Chore”, ya no tuvo fuerza en sus piernas y se comenzó a hundir entre la profundidad de 2 metros y medio.
Un grupo de cinco jóvenes que platicaban en el cruce de las calles Xicaltongo y Axotla, al percatarse que “El Jony”, intentaba rescatarlo, corrieron para también entrar al canal y ayudar.
En un momento “El Jony” logró sujetar del brazo al comerciante de chocolates, pero a un metro de llegar al bordo del canal, se le soltó y en ese momento, ya no pudieron rescatar a Óscar, quien en segundos se perdió entre el agua de riego.
Ante los hechos, el personal del Centro de Operaciones del 066 de emergencias comenzó a recibir llamadas sobre el accidente, lo que obligó a la movilización del personal de Protección Civil y elementos de Bomberos.
La zona fue acordonada durante la búsqueda por elementos de la Policía Municipal, en tanto, seis buzos de Bomberos, una hora después de la desaparición del joven, lograban rescatarlo, pero sin vida.
Entre el llanto de su familia y amigos, ingresaron al lugar, agentes de la Policía Ministerial con personal pericial de la Procuraduría de Justicia, se hicieron los peritajes correspondientes y momentos después se ordenó el trasladado del cadáver del “Chore”, al Servicio Médico Forense (Semefo), en donde le practicaron la necropsia de ley para conocer las causas de la muerte.

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