León, Guanajuato.- “Su mirada, eso es lo que más voy a extrañar de él y pues todo, pero más su carita y la forma como mira con tanto cariño, eso es lo que más extrañaré”, expresó con la voz entrecortada Erika Romero quien con su hermana Sandra decidió adoptar a Asgard, un perro adulto con cáncer terminal.
Aunque se desconoce cuánto tiempo de vida le queda a Asgard, un perro bóxer de 11 años que a pesar de que tenía dueños, fue rescatado por FanyLu de Adopciones Responsables en la colonia Jacinto López en enero de este año, ambas hermanas no dudaron en brindarle un techo, cuidados y la compañía de 12 perritos que ya tienen en casa.
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Ya nos habíamos encontrado en una situación similar con otro perrito, un pug que tuvo moquillo, solo duró dos meses con nosotras y falleció, también decidimos correr el riesgo porque sabemos que es un momento muy doloroso pero lo afrontamos”, contó Erika.
Hace poco más de un año Erika y Sandra conocieron a la rescatista FanyLu y desde entonces la apoyan con hogar temporal para algunos de sus perritos rescatados y que son puestos en adopción, el más reciente fue Asgard quien fue acogido por las hermanas hace unos 5 meses.
“A principios de julio llegó el diagnóstico del cáncer por un tumor en el vaso, y el cariño que ya le tomé es lo que me motivó a hacerme cargo de Asgard, a partir de que se lleva a los adoptones yo tenía la ilusión de que se iba a adoptar, pero por mi mente y corazón mi anhelo era que no se adoptara porque ya me había encariñado con él.
Cuando yo iba a los adoptones había momentos en que se me quedaba mirando mucho y a veces decía: ‘bueno, que encuentre hogar definitivo’, pero siempre se me quedaba viendo y cuando me lo traían de regreso a casa porque no se adoptó y me daba sus patitas yo sentía que él era para mí y que no se tenía que ir con nadie más”, platicó Erika emocionada.
Recordó que Asgard que ya está desahuciado requiere los mismos cuidados que un cachorro, pues debido a su edad y a la enfermedad camina con dificultad y no puede bajar ni subir escaleras, entre ella y su hermana lo suben a un sillón donde duerme la mayor parte del tiempo.
“Ha disminuido su condición de salud, sabemos de antemano que mucha gente no quiere adoptar perros viejitos por el corto tiempo que a lo mejor les puede quedar, pero son perritos muy tranquilos, que no dan lata.
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Asgard no hace más que estar dormido y camina por ratitos, es un amor y sin embargo, por su aspecto físico, edad y los cuidados que implica, por eso la gente no quiere adoptar perros en estas condiciones”, lamentó Erika.
Hace 10 años, proteger de la lluvia a una perrita que vagaba una noche afuera de su casa, fue como Erika y Sandra comenzaron a rescatar perros, ahora tienen 12.
“Le dimos hogar porque estaba lloviendo y dijimos que nada más por ese ratito y a la mera hora se quedó aquí.
Y de ahí empezamos con uno y otro y también a ayudar en casos particulares con hogar temporal hasta que Asgard es el último que ha llegado con nosotros, pero no somos albergue ni fundación”, finalizó Erika.
La rescatista de Asgard dijo que no importa si a nuestras mascotas les queda un día, un mes o años de vida, “ellos merecen tener una buena calidad de vida junto a sus seres amados y aunque duela verlos partir, ellos hacen que cada segundo a su lado, valga la pena”, expresó.
DSS
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