La advertencia sobre que un grupo de choque nuevamente intentaría tomar la cementera Cruz Azul, en Tula, provocó que trabajadores resguardaran la planta la madrugada de este martes derivado de un clima de tensión que prevalece desde hace días en la cooperativa.
El C5i de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo detectó mediante monitoreo 6 autobuses y 5 vehículos rotulados como taxis cuando transitaban por Tepeji del Río y después retornaron sobre la autopista Arco Norte, dirección a la Ciudad de México.
Ante ello, los cooperativistas se congregaron en los accesos de la cementera para impedir que el grupo de choque tomara las instalaciones, como sucedió en abril del actual año cuando un enfrentamiento por la posesión de la planta provocó 8 decesos y 12 personas lesionadas.
Hasta el momento, la policía estatal no reporta incidente alguno en las inmediaciones de la cementera en Tula.
Los simpatizantes de Federico Sarabia Pozo y Alberto López Morales son quienes operan la cementera Cruz Azul, en Tula, y quienes se atrincheraron para impedir que un grupo de choque tomara las instalaciones el 27 de abril.
Y responsabilizaron a Víctor Manuel Velázquez Rangel y José Antonio Marín Gutiérrez de enviar al grupo de choque a la cementera.
En las últimas horas en redes sociales circulan advertencias sobre un supuesto nuevo ataque contra la cementera.
“Vuelven a sonar las alarmas por otro posible ataque a la cooperativa Cruz Azul Hidalgo por parte del grupo disidente encabezado por Víctor Manuel Velázquez Rangel y José Antonio Marín Gutiérrez, que buscan tomar el control de manera violenta”, señalan los mensajes difundidos en redes sociales.