Ciudad de México.- El extitular de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, fue detenido el viernes por la tarde.
Mediante un comunicado, la Fiscalía General de la República confirmó la detención de Murillo por la Policía Federal Ministerial.
“Personal policiaco de la Fiscalía General de la República (FGR), cumplió la orden de aprehensión solicitada por esta Institución y otorgada por el Juez de Control del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México, con sede en el Reclusorio Norte, en contra de Jesús ‘M’, quien fuera Procurador General de la República, por los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de justicia, en el caso ‘Ayotzinapa’”.
La detención de Murillo fue al exterior de su domicilio y no puso resistencia a su detención, informó la Fiscalía.
“El detenido ha sido trasladado a las instalaciones de la Fiscalía para las certificaciones correspondientes; y enseguida será puesto a disposición de la autoridad judicial, en cumplimiento de la orden de captura señalada”.
Jesús Murillo y la ‘verdad histórica’
Como procurador general durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, Jesús Murillo Karam, de 74 años, tuvo a su cargo la investigación del caso Ayotzinapa, sobre la desaparición de 43 estudiantes normalistas en la Escuela Normal Rural, Isidro Burgos en Iguala Guerrero.
Durante su periodo como procurador (de 2012 a 2015), Murillo presentó la llamada “verdad histórica”, un informe de las investigaciones del caso Ayotzinapa.
Antes de dejar su cargo, en 2015, el extitular de la PGR presentó el último informe de la “verdad histórica”, señalando las declaraciones de Felipe Rodríguez Salgado, conocido como “El Terco”.
“El Terco”, presunto miembro de los Guerreros Unidos, habría participado en el secuestro, homicidio y desaparición de 43 estudiantes normalistas.
También se sustentó en dichos de Patricio Reyes Landa, “El Pato”, Jonathan Osorio Gómez, “El Jona”, y Agustín García Reyes, “El Chereje”, quienes fueron los primeros detenidos.
Murillo, durante las preguntas de los periodistas, expresó “ya me cansé”, frase que causó indignación y por la que legisladores del PRD pidieron un juicio político contra él después de que dejara su cargo en 2015.
Hijos y familiares de Murillo beneficiados por SCT
En 2016, AM/Al Día reveló que los hijos, sobrinos y familiares de Jesús Murillo Karam, multiplicaron contratos de obra pública en 17 estados, incluyendo Guanajuato, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
La empresa Kouro Desarrollos, de la que eran socios los hijos Jesús Murillo Ortega y Sandra Georgette, Gerardo Saade Kuri, sobrino, y el yerno, Carlos Castañeda Murillo, multiplicó siete veces los contratos con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Además, Alvarga Construcciones, empresa asociada a Kouro, tuvo ocho veces más contratos, mientras que Itrio Arquitectos, propiedad de una sobrina de Murillo, logró multiplicar por cinco el monto de obras adjudicadas.
En el caso de León, la constructora Alvarga ganó el contrato de 85 millones de pesos para la construcción de la segunda etapa del distribuidor vial Benito Juárez, en el libramiento Morelos, pero no terminó la obra, de acuerdo con una solicitud de información realizada por el periodista de AM, Jesús García López.
En los tres primeros años del sexenio de Enrique Peña Nieto, Kouro Desarrollos recibió contratos por 1,402 millones en los que se incluye el puente vehicular Antonio Madrazo, entregado con fallas, y la segunda etapa del Distribuidor Vial Benito Juárez, que abandonaron a la mitad, ambos sobre el bulevar Morelos de León.
Mientras que la constructora Itrio Arquitectos, de la que es socia mayoritaria Patricia González Murillo, sobrina de Murillo Karam, multiplicó sus contratos de 222 millones a 1,203 millones de un sexenio a otro; la obra de mayor monto (por 885 millones) se le dio en forma directa -sin licitación- para edificar el centro de control C5, en Morelos, con fondos federales.
“La ley es muy clara, conflicto de interés es que ciertas obras hubieran sido, en procesos constructivos, dentro de la oficina que dirigía su papá, dentro de la Procuraduría”, expresó en ese entonces Raúl Murrieta Cummings, subsecretario de Infraestructura de la SCT, negando que hubiera favoritismos.
Ejército pudo haber salvado a los normalistas de Ayotzinapa
Ayer, Alejandro Encinas, Subsecretario de Derechos humanos, Población y Migración, reveló que fue un “crimen de Estado”, que involucró a todos los niveles de gobierno, además de que la Sedena infiltró a un soldado en la Normal de Ayotzinapa para informar sobre las acciones de los estudiantes en septiembre de 2014.
“En todo momento las autoridades federales, estatales y municipales tuvieron conocimiento de la movilización de los estudiantes. Sus acciones, omisiones y participación permitieron la desaparición y ejecución de los estudiantes, así como el homicidio de otras seis personas”.
En la presentación del el informe de la presidencia de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, Alejandro Encinas narró que Julio César López fue infiltrado por el Ejército con el fin de informar sobre los actos preparativos de los normalistas de cara a la marcha del 2 de octubre de aquel año.
“Desde el momento en que se estaban haciendo los preparativos de la movilización de los estudiantes, de cara al 2 de octubre, todas las autoridades estatales, municipales y federales estuvieron realizando el seguimiento y las acciones de los estudiantes. Tan es así que impidieron la toma de los autobuses, pero además la Secretaría de la Defensa Nacional tenía dentro de la Normal al soldado Julio César López, quien estaba realizando informes para la Secretaría de la Defensa Nacional dentro de la Normal.
FRG