“La reina ha muerto, viva el rey, en este caso, Carlos de Inglaterra“, dijo hoy la periodista Anna Bosch, ex corresponsal de la TVE de Londres. Pero, ¿Por qué dijo esto? ¿Es en verdad Carlos el nuevo rey?.
Durante los últimos meses, debido a los problemas de salud de la Reina Isabel II, el príncipe Carlos ya había asumido deberes en la primera línea, pero lo cierto es que hay una larga lista de sucesión en la que figuran más nombres.
Una de las hipótesis más comentadas es la abdicación del hijo mayor de la Reina Isabel II, para darle el paso al trono a su hijo mayor, Guillermo, el duque de Cambridge, que a sus 40 años podría convertirse en rey.
Detrás de Guillermo, se posicionan en la línea de sucesión sus tres hijos, el príncipe Jorge de Cambridge (9 años), la princesa Carlota de Cambridge (7 años) y Luis de Cambridge (5 años).
En un ya lejano sexto lugar en la línea, está el hijo menor de la princesa Diana de Gales, el príncipe Enrique, seguido por sus dos hijos, Archie (3 años) y Lilibeth (1 año).
Al confirmarse el fallecimiento de la reina, Carlos automáticamente se convirtió en rey no coronado, por la regla del derecho consuetudinario Rex nunquam moritur, que significa, “el rey nunca muere”.
En caso de que Carlos no abdique, iniciaría su reinado a los 73 años de edad; por ello se especula si asumirá la corona o la cederá a su hijo. Muchos desean que Guillermo sea el sucesor de la Reina Isabel II, pues es del conocimiento popular que el pueblo británico no ve con buenos ojos que la esposa del príncipe Carlos, Camila Parker, se convierta en reina consorte.