León, Guanajuato.- Juan Carlos Cuéllar, el joven asesinado en León el pasado domingo tras defender a su hermana de un intento de asalto, empezó desde los 14 años a trabajar. Quería llegar lejos en la vida, y comenzó por lavar autos y ser “viene viene” en el Gimnasio Exploit.
Era un grande, llegó un día a pedir empleo, no había nada que ponerlo a hacer y lavaba autos de los socios que venían, eso no le importaba, se le notaban las ganas”, explicó Jazmín, que forma parte del equipo de entrenamiento que lo vio crecer.
Luego de estar viendo a través del vidrio cómo se ejercitaba la gente, se le metió en la cabeza la idea de estar “tronado”, al grado de que a los 16 años comenzó a hacer ejercicio y convertirse en un instructor certificado tiempo después.
Se cuidaba, gastaba mucho dinero en su imagen porque lo vio como una cuestión de competencia”, señaló su papá Juan Carlos, quien guarda en una pared de su casa más de ocho trofeos de competencias de constructivismo en las que participó y ganó.
Se formó en escuelas públicas, aunque no vivió con tantas carencias como otros vecinos de la colonia Predio San Pablo Sur, donde creció.
Joven asesinado en León luchaba para terminar sus estudios
La idea de una licenciatura era parte de su añoranza para romper el hito familiar de no concluir estudios universitarios, y para conseguir mantenerse en competencias y lograr pagar sus estudios buscó otro trabajo, por lo que dejó el gimnasio.
Era un joven al que le faltaban dos cuatrimestres, era calmado, reservado, pero siempre atento a todos, ese grupo de nueve (en su salón) era una familia y se notó su pérdida”, explicó Miguel Acosta, coordinador del plantel UCEM, edificio Insurgentes.
Para costear por más de tres años sus estudios universitarios, “Choche”, como le decían sus amigos de aula, trabajaba como promotor de una empresa de electrolitos en León.
Tenía seguro lo que quería, estaba trabajando y hace poco lo acababan de ascender porque quería llegar a un puesto de gerente y ya hacía el trabajo de la región cuando lo ascendieron en la empresa”, explicó su hermana Miriam.
A la par de sus estudios, entrenamiento y ser ejemplo para sus tres hermanos y familia, tenía una relación con Dulce López, con quien se había comprometido en matrimonio.
Apenas nos enteramos de que el viernes pasado ya había puesto una fecha para la boda, en menos de dos años ya estaría casado, porque ya le había dado el anillo de promesa a su novia”, explicó Miriam.
Antes de su asesinato, el joven formalizó su boda
Juan Carlos conoció a Dulce desde los 13 años en las posadas porque eran vecinos; Carlos tomó la iniciativa y le habló.
Era el amor de mi vida, era increíble… recuerdo la primera vez que llegó a mi casa y de inmediato me dijo que fuéramos novios antes de tener una cita, me dio risa y le dije que no, que primero nos conociéramos, cuando pasó más tiempo le dije que sí”, contó Dulce a AM.
El primer periodo de su noviazgo fue de jóvenes adolescentes, y aunque hubo una ruptura, dos años y seis meses atrás reanudaron su enamoramiento para formalizar.
Me decía que nos casáramos, pero apenas el viernes pasado habíamos concretado fecha para hacerlo”, comentó.
A unas horas de ser la prometida de Juan Carlos, recibió una llamada de Miriam en la que explicó que había perdido la vida.
Estaba en casa de mi abuela cuando me marcó y me dijo que lo mataron, llegué y lo vi tirado, fue horrible y quería despertarlo”, dijo.
Novia del joven asesinado en León soñaba con formar un hogar
Dulce tenía en la mente el plan que juntos construyeron: casarse, tener hijos, una casa, un auto bonito.
Yo estaba feliz y de un día para otro me lo arrebataron, a las autoridades que por favor hagan algo porque no se merecía morir así, pero entiendo que defendió como un héroe y seguro hubiera hecho lo mismo por mí”, dijo a Periódico AM.
El 24 de junio era la fecha de aniversario de la joven pareja, que ya no cumplirá más años por un disparo en un asalto afuera de la casa de Carlos.
Siempre me cuidaba, nunca lo voy a olvidar, era el mejor novio, adoraba a su mamá y su familia y no quería verla batallar, con eso me quedo”.
GGL