No fue un nocaut arrollador lo que impidió pelear al boxeador Newfel Ouatah sino la falta de seguro médico, razón suficiente para que en el primer asalto de su combate ante Simon Kean, el francés pusiera su rodilla derecha en el cuadrilátero y se negara a pelear.
El Montreal Casino de Canadá, el fin de semana, fue escenario de un momento insólito en la historia del pugilismo en los pesos completos, pues la que se anunció como la pelea estelar en la cartelera, terminó en pocos segundos por la decisión de uno de los púgiles involucrados.
Ouatah, de 36 años, y Kean, de 33, estaban por protagonizar el combate principal del Montreal Casino. Por su marca de 21-1, 20 de sus victorias por nocaut, Kean aparecía como el favorito a vencer.
Desafortunadamente, los aficionados que se dieron cita en el lugar de la pelea no pudieron disfrutar del que se vislumbraba como un gran combate, pues en los primeros segundos, Ouatah puso su rodilla en tierra y levantó el brazo derecho en señal de protesta.
Lo sucedido dejó a todos sorprendidos, incluso al réferi de la pelea que se acercó al boxeador para comprobar si todo estaba bien, fue en ese momento cuando Ouatah dijo que se rendía y que no pelearía.
Claro que los abucheos no se hicieron esperar, incluso tacharon de ‘cobarde’ al francés, quien poco después dio a conocer la razón por la que decidió no pelear ante Simon Kean en Canadá.
“Recién esta mañana (sábado) recibí una carta de la Federación Francesa diciéndome que no contaba con seguro en caso de alguna desgracia en la pelea y que ellos no se harían responsables. En el boxeo hay quienes tienen muchos privilegios, yo no soy de esos. Si me vieron arrodillarme fue como protesta”, declaró a la cadena ESPN, de acuerdo con Mediotiempo.