Guanajuato.- La audiencia donde se dictaría sentencia al agresor de Ana por violencia se tuvo que posponer cuatro meses más, ya que su expareja (el demandado) es alemán y se necesita un intérprete de su lengua madre para evitar conflicto y violación de Derechos Humanos.
El tiempo se determinó debido a temas de agenda en el Poder Judicial por la falta de salas para realizar las audiencias del sistema penal acusatorio, pues actualmente están saturados los horarios y la disponibilidad.
La sesión será a las 9 de la mañana del 18 de enero del 2023, así lo dicta por temas de agenda en las salas”, explicó el juez en la audiencia a la que tuvo acceso AM este martes 20 de septiembre.
Ana comenzó una relación sentimental con su agresor y jefe en el año 2020. El acusado es Director de una empresa alemana proveedora de autopartes.
Al principio todo era bonito, a tal grado que se fueron a vivir juntos, pero el terror de Ana apareció con las primeras humillaciones, insultos racistas, empujones y golpes que llegaron hasta sus partes íntimas.
Siempre en la empresa llegaba con golpes y el médico me preguntaba qué me pasaba, yo le decía que me caía o que eran mareos, entonces detectó que el doctor que no era así y me recomendó (hacer algo) porque uno de los últimos días me intentó ahorcar”, explicó Ana a periódico AM.
Debido al retraso de la audiencia para la sentencia, Ana y su equipo de abogados temen que el agresor escape a otro país, pues el pasado agosto renovó su pasaporte, tiene facilidad por la empresa de ir a trabajar en otra sede y no hay restricción alguna para irse.
Es importante hacer conciencia de que no pueden hacer esto, pero el sistema saturado nos da esta fecha que no da seguridad de que realmente se pueda hacer justicia porque se puede escapar”, explicó Mónica Gómez Lule, abogada de la víctima.
A punto de cumplirse un año desde el pasado 17 de diciembre que comenzó el proceso legal contra su victimario, Ana sigue dándose valor todos los días, pues al ser su jefe directo, su agresor continúa hostigándola con tareas de la empresa.
Voy a trabajar porque necesito mi trabajo y porque es Director me intimida. Por esta situación me dijeron en Recursos Humanos que no pueden correrme, pero si en él estuviera, me corriera, diario me siento más presionada porque llega y avienta las cosas, me lo topo y me habla en alemán insultándome, no lo entiendo, pero yo sé que me insulta”, dijo Ana.
El agresor es alto, tiene las manos grandes y con ellas golpeaba a puño cerrado a Ana, una mujer menuda de apenas un metro 50 de estatura.
Yo le decía que si ya no quería nada que me dejara, pero me decía que era de su propiedad y fueron muchas cosas, pero en el momento que me canalizaron al Instituto de la Mujer, fue donde se me ayudó en sacar todo lo que traigo porque la verdad es bien difícil”, dijo.
De acuerdo con la versión entregada al juez en audiencia, la Embajada alemana en México tiene notificación del caso, pero al momento no se pronuncia sobre el proceso legal que enfrenta el ciudadano alemán en León.
DSS