El keniano Moses Wanyoike Gitau la pasó mal durante la pandemia.
Hoy con 36 años, Wanyoike llegó a México en 2017, con la ilusión de vivir de las carreras atléticas y con los premios, enviarle dinero a su familia en Kenia.
Pero la pandemia de Covid-19 lo dejó desamparado en 2020, cuando debió buscar empleos informales para sobrevivir, sin dejar sus entrenamientos.
‘Todos estamos luchando’
A mediados de ese año, con todas las carreras del país canceladas, Moses Wanyoike consiguió trabajo como cuidacoches en un supermercado de Zinacantepec, Estado de México.
Ahí combinaba los entrenamientos en el Nevado de Toluca con el trabajo de “viene, viene”, en el que se ganaba unos pesos cada día.
“Ya no hubo más carreras, entonces tuve que buscar un trabajo”, le comentó Moses a la Agencia Reforma en aquel 2020.
“Aquí estoy (en el estacionamiento) casi todos los días. Llego a las 3 y me voy a las 10 de la noche. Estoy en una casa con otros corredores de mi país, todos estamos luchando por encontrar un poco de dinero para comida y pagar la renta de la casa, luz y agua. Es muy duro y recibo poco dinero”.
Fueron días duros para el keiano, nacido en 1986 y quien ya tenía algunas victorias en México, alternando eventos de 10, 21 y 42 kilómetros.
“Otros corredores de mi país nos dicen que ya van a correr en Europa, pero nosotros no podemos ir porque no tenemos dinero para viajar”.
Sonríe en el Maratón León 2022
Pero en este 2022, el deporte le ha vuelto a sonreír a Moses. Este domingo ganó el tradicional Maratón de León, el más antiguo con esta distancia en el País, y así se llevó un premio de 80 mil pesos, aunque la cantidad baja por las comisiones que se le cobran a los atletas extranjeros.
En las calles de León, Moses dominó de punta a punta, venciendo a sus compatriotas y a los mexicanos que ya parecen acostumbrados a los imponentes triunfos africanos.