Las autoridades brasileñas inauguran el domingo el estadio Arena da Amazonia en Manaos, el noveno que está listo para los partidos de la Copa del Mundo. Tres todavía no están terminados, incluyendo el que albergará el juego inaugural en Sao Paulo dentro de unos tres meses.
El Arena da Amazonia no está completamente acabado, pero las autoridades locales lo inaugurarán el domingo con un partido del campeonato regional al que asistirán unas 20.000 personas, incluyendo los trabajadores que ayudaron a construir el recinto.
El estadio con capacidad para 44.000 espectadores será la sede de cuatro partidos del Mundial en junio: Inglaterra-Italia, Camerún-Croacia, Estados Unidos-Portugal y Honduras-Suiza.
El Arena da Amazonia fue uno de los seis estadios que no estuvieron listos para finales del año pasado como quería la FIFA. Se esperaba que fuera inaugurado el mes pasado pero el evento debió posponerse debido a que aún faltaban muchos detalles en ese momento.
El partido del domingo entre Nacional y Remo se jugará como si fuera un encuentro de la Copa del Mundo desde el punto de vista organizativo.
“Tenemos que poner todo a trabajar de modo que podamos corregir de inmediato cualquier cosa que salga mal”, dijo el gobernador del estado Amazonas Omar Aziz. Añadió que se realizarán otros dos eventos de prueba antes del comienzo del Mundial.
Únicamente aficionados con boletos serán admitidos en un perímetro de un kilómetro (0,6 millas) alrededor del estadio. Además de los 13.000 boletos vendidos al público, los trabajadores del estadio y sus familiares recibieron 7.000.
Más de 2.500 policías trabajarán durante el partido, entre ellos 200 a cargo de vigilar a los revendedores afuera del estadio y unos 70 oficiales en el interior pendientes del campo y las graderías.
El Arena da Amazonia costó cerca de 290 millones de dólares, unos 70 millones más de lo previsto originalmente. La construcción estuvo marcada por la muerte de tres trabajadores, entre ellos un portugués de 55 años que murió en un accidente el mes pasado mientras desmontaba una grúa que se utilizó para instalar el techo.
La amazónica ciudad de Manaos fue noticia el año pasado antes del sorteo del Mundial, cuando el técnico de Inglaterra, Roy Hodgson, dijo que era “el lugar ideal para evitar” debido al clima húmedo de la región. Los funcionarios locales se quejaron, pero el conflicto se disipó y Hodgson recibió una cálida bienvenida durante su visita a la ciudad el mes pasado.
Los estadios brasileños todavía en construcción son el Itaquerao en Sao Paulo, el Arena Pantanal en Cuiabá y el Arena da Baixada en Curitiba, que el mes pasado estuvo a punto de ser eliminada como sede debido a retrasos en el estadio.
Brasil también batalla para terminar las obras de infraestructura alrededor de los recintos en las 12 ciudades sede, y las autoridades locales admiten que no todo va a estar listo.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *