Washington.- El presidente estadounidense Joe Biden planteará el lunes la posibilidad de imponer un impuesto extraordinario a las empresas de energía, dado que su gobierno tiene como objetivo combatir los altos precios de la gasolina a pocos días de las elecciones intermedias.

La Casa Blanca informó que Biden hará declaraciones para responder “a los informes de días recientes respecto a que importantes compañías petroleras han obtenido ganancias récord, incluso cuando se niegan a ayudar a bajar los precios en las gasolineras para el pueblo estadounidense”.

Una persona familiarizada con el asunto dijo que Biden propondrá imponer un impuesto a las ganancias de las empresas de energía al tiempo que busca presionarlas para que reduzcan los precios para los consumidores. La persona habló bajo condición del anonimato al ofrecer un adelanto de las declaraciones de Biden.

Las compañías petroleras obtuvieron miles de millones de dólares en ganancias este trimestre”, tuiteó Biden el sábado. “Están utilizando estas ganancias récord para pagar a sus ricos accionistas en lugar de invertir en producción y reducir los costos para los estadounidenses. Es inaceptable. Es hora de que estas compañías bajen los precios en las gasolineras”.

Los altos precios en las gasolineras han exacerbado la inflación y han pasado factura a la posición de Biden y los demócratas entre los votantes.

El Congreso tendría que aprobar cualquier impuesto adicional sobre los productores de energía, lo que sería una tarea difícil en el Congreso actual, donde los demócratas tienen un control limitado de la Cámara de Representantes y el Senado, y aún menos probable en caso de que los republicanos retomen el control de una o ambas cámaras el 8 de noviembre.

La semana pasada, Exxon Mobil batió récords con sus ganancias en el tercer trimestre del año, recaudando 19 mil 660 millones de dólares en ingresos netos, y Chevron tuvo 11 mil 230 millones en ganancias, casi alcanzando las ganancias récord que logró en el trimestre anterior.

Los estadounidenses han batallado ante precios de la gasolina dolorosamente altos en los últimos meses, pagando en promedio más de 4.80 dólares por un galón de combustible regular a principios de julio, de acuerdo con la American Automobile Association (AAA).

Desde entonces, han caído a 3.76 en promedio a nivel nacional, pero la Casa Blanca considera que deberían ser más bajos, dada la caída en los precios del petróleo a nivel mundial durante el mismo período.

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HEP

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