Te compartimos la historia de Luz Eréndira Delgado Martínez, quien fue ganadora del primer lugar del concurso AsústAMe. Conoce este relato de miedo:
Mi historia comienza con el nacimiento de mi hija. Nos mudamos a una casa en la colonia de Lomas Del Mirador y todo se veía bastante normal, hasta que una noche que mi esposo trabajó hasta tarde y me quedé sola con mis dos hijas, estaba preparándome para bañarme cuando se abrió la puerta del baño con demasiada fuerza como para ser del viento. Yo pensé que mi esposo había llegado ya de su trabajo y estaba jugándome una broma. Salí del baño y mis hijas estaban dormidas en su cuarto y mi esposo no se encontraba. Volví a entrar al baño y puse el seguro de la puerta y ya en la regadera se volvió a abrir la puerta dos veces más con demasiada fuerza. Me comencé a preocupar así que llamé a mi esposo y él seguía en su trabajo…después de ese día empezó la pesadilla de mi familia
Cada noche, exactamente a las 2:45 a.m., tenía una sensación rara de que alguien me observaba. Despertaba y en la puerta de mi habitación se veía una gran sombra de algo inexplicable de estatura alta, cuerpo extremadamente delgado y ojos grandes y rojos. La primera vez que vi la sombra me asusté mucho y llamé a mi esposo y era como si él estuviera inconsciente porque por más que le hablaba no podía despertarlo.
Todas las noches era lo mismo y yo estaba desesperada, pero por problemas económicos no podíamos cambiarnos de casa. Mi bebé de aproximadamente tres meses, sin razón comenzaba a llorar desconsoladamente mirando fijamente a la ventana y así pasaban los días. Era tanto el llanto de mi hija que los vecinos se preocuparon. Mi hija la mayor en ese entonces tenía seis años, de era muy independiente y desde que nos mudamos a esa casa para todo quería estar con mi esposo y conmigo no quería estar sola en ningún momento. porque decía que siempre soñaba con un hombre malo y lo describía como la sombra que yo siempre veía por las noches.
Mi esposo no creía lo que yo le decía que veía y me decía que era mi imaginación, hasta que un día que él estaba solo y estaba en el baño, vio una mano con dedos muy largos y desde ese día me creyó. Comenzamos a buscar otra nueva casa porque cada vez eran más las experiencias paranormales que se presentaban y ya no lo soportábamos.
Mi hija en un tiempo se enfermó y no tuvimos oportunidad de cambiarnos. Mi esposo y yo sólo llegábamos a dormir porque mi hija pequeña estaba internada y en una ocasión que yo estaba en la casa llegó mi mamá a hacerme compañía para no quedarme sola, porque estaba pasando unos momentos muy difíciles. Me cuenta mi mamá al siguiente día, que mientras yo dormía estaba desesperada en mis sueños, ella estaba recostada junto a mí y en un momento comenzó a ver la misma sombra de ojos rojos y una voz grave que decía “es mía ella, es mía”.
Adoptamos a una perrita para que le hiciera compañía a mi hija mayor, ya que nosotros no asistíamos a la casa por la enfermedad de mi bebé. La perrita estaba preñada y dio a luz a seis cachorros, todo estaban en perfecto estado de salud y aproximadamente a los dos meses yo estaba en la casa y había dado de comer a los cachorros. A las 6:30 am regresé al hospital y mi esposo se regresó a la casa después de estar el por la noche ahí.
Cuando mi esposo llega a la casa a las 9:00am me marca por teléfono molesto y me reclama que porqué había dejado a los seis cachorros muertos y no le había avisado, porque estaban todos como piedras y había un olor putrefacto. Parecía que tenía mucho tiempo muertos por los olores y el estado en el que se encontraban. Yo me asusté mucho porque esa misma mañana todos estaban muy bien y no parecían enfermos.
Después de un mes por fin me dan de alta a mi bebé del hospital y regresamos a la casa. El primer día de estar por fin en casa tenía a la bebé en medio de mi esposo y mío durmiendo y sentí que la niña se recorrió muy rápido para una bebé de seis meses pero no di importancia. La volví a acomodar y la abracé, después de otros minutos volví a sentir otro jalón pero demasiado fuerte e inmediatamente abrí los ojos y prendí la lámpara del buró y mi hija estaba recorriéndose hacia debajo de la cama y estaba la sombra frente a la cama y era lo que estaba recorriendo a la bebé. Después de eso no dormí nada y desperté a mi esposo. Mi hija mayor y yo nos fuimos a la casa de mi mamá y al siguiente día le conté lo que pasó y me dejó quedarme un tiempo a vivir en su casa y no volvimos a esa casa nunca más. Desde ese día dejaron de pasarme experiencias paranormales.
Esto pasó hace 10 años y la casa sigue sin ser rentada y la agente que va a rentar no dura más de una semana y se van, esa casa tiene algo inexplicable.