El secretario general de la Organización de los Estados Americanos, el chileno José Miguel Insulza, afirmó el jueves que la crisis política y social que vive Venezuela no afecta la democracia en el continente, por lo que no se justifica invocar la Carta Democrática Interamericana.
Insulza, entrevistado por radio ADN de Chile, dijo que “se requiere, a través de la Carta Democrática Interamericana, que se considere que la situación afecte la democracia o la seguridad del continente”.
Agregó que “se determinó que lo de Venezuela no afectaba a la democracia. Hay casos que son evidentes, son imposibles de cuestionarlos, como lo que pasó en Honduras”, dijo Insulza.
En 2009 la OEA suspendió a Honduras del organismo tras la crisis que concluyó con la salida del poder del presidente Manuel Zelaya.
La cláusula democrática se aplica en casos de ruptura del proceso democrático en un Estado del hemisferio y constituye un obstáculo insuperable para la participación del gobierno del país cuestionado en las Cumbres de las Américas.
La crisis en Venezuela, que ya ha cobrado la vida de más de 20 personas, es objeto de preocupación en los países de la región y en Estados Unidos. La víspera cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) aprobaron, a petición del gobierno venezolano, el envío de una comisión de ministros de Relaciones Exteriores a esa nación para que apoye y asesore un diálogo político amplio y constructivo para superar la actual situación.
Venezuela acusa a Estados Unidos de financiar a grupos violentos de la oposición, mientras el vicepresidente estadounidense Joe Biden calificó de “alarmante” la situación venezolana.
Sobre la cita de la Unasur Insulza recordó que “fue Venezuela el que pidió la reunión. Es un fetiche separar a la OEA de sus países miembros. Eso permite hacer el discurso antiimperialista, que es el discurso al que Venezuela recurre habitualmente”.
Los gobiernos del presidente Nicolás Maduro y de su antecesor Hugo Chávez han tenido continuas discrepancias con Insulza. En esta ocasión el canciller venezolano Elías Jaua realizó una gira por Bolivia, Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil, para presionar para que fuera la Unasur la que se pronunciara por la situación venezolana y no la OEA.
Insulza ha opinado que en Venezuela hay problemas de independencia del poder judicial y restricciones a la libertad de expresión, temas sobre los cuales los cancilleres de la Unasur no se pronunciaron en su resolución del miércoles.