Con una solemne misa, recordaron a las personas que perdieron la vida hace tres años en la explosión de un ducto de gasolina en San Primitivo, Tlahuelilpan.

El viernes 18 de enero de 2019 explotó una toma clandestina en un oleoducto con saldo de 137 personas muertas en este municipio.

Como señal de luto, familiares de las personas que fallecieron en el lugar y población de dicho municipio celebraron una misa en la denominada zona cero, donde ocurrió el estallido.

ZONA DESCUIDADA 

Hierba alta y el lugar descuidado, es como lucía el espacio que fue destinado para recordar el acontecimiento.

Sin embargo, minutos antes de la celebración eucarística, tanto familiares como personal de la alcaldía limpiaron un poco el espacio, por lo que fue retirada la maleza y basura que ahí estaba. 

Bajo una gran lona blanca las y los asistentes escucharon la celebración religiosa que duró poco más de una hora y culminó con un mensaje de solidaridad para las personas que perdieron a un familiar.

“Pareciera que ese dolor no termina, algunos han tratado de hacer su vida, sonreír, trabajar, pero no es fácil, es tiempo de ir abriendo nuestro corazón, de aprender a cargar esta cruz”, comentó el sacerdote encargado de dirigir la misa.

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