Proyecta juventud, entusiasmo y frescura su presencia agradable, de mirada fija, de ojos grandes, vivaces y seguridad en su actuar. Su sonrisa impecable se ve sincera y espontánea, mostrando sus dientes blanquísimos y sobresalientes. Su tonalidad de voz es la adecuada, su sonido un poco grave le ayuda aún más en la claridad de su expresión; cuando lo desea y de manera selectiva, dependiendo del tema, levanta la voz, pero en general es suave y serena.
Estas características son atribuibles a la senadora Claudia Ruiz Massieu Salinas, quien en una visita muy discreta vino a nuestra ciudad el viernes 27 de enero a cumplir con la invitación de la directiva de la Concamin Nacional que preside nuestro coterráneo y líder nacional José Abugaber.
Esta oportunidad dio pauta a que la recibiera y saludara su amigo, compañero y ex colaborador en la Secretaría de Relaciones Exteriores, Francisco Arroyo Vieyra, quien, a su vez, para contribuir a la amenidad y ampliar el círculo amistoso, nos invitó a desayunar al Ing. Enrique Gómez Orozco con ella, previo a su compromiso. Durante más de dos horas departimos los cuatro con conversaciones alternadas con anécdotas políticas, con puntos de vista personalizados sobre diversos temas, sin solemnidades, ni orden ni agenda o guía preestablecida, como platican los buenos amigos, o al menos así nos lo hizo sentir.
La amenidad, tacto, inteligencia y fineza de lenguaje de Claudia, sobresalen seguramente por su vasta experiencia en el trato diplomático, durante su paso por el Servicio Exterior.
El cúmulo de temas comentados parecerían muchos, pero como variaban y alternaban entre los cuatro, el tiempo transcurrió sin que lo notáramos, además con mucha agilidad mental y conocimiento, la Senadora explicaba con brevedad y profundidad sus opiniones. El PRI, la Alianza; inevitable comentar de la trayectoria y muerte de su padre Francisco Ruiz Massieu y de Luis Donaldo Colosio en ese inolvidable año de 1994; desfilaron el desglose y análisis de la economía, referencias a la diplomacia y algunos funcionarios de carrera en el Servicio Exterior Mexicano que los comensales conocemos; con el Ing. Enrique Gómez Orozco, hablaron desde religión hasta filosofía en general.
No podía faltar hablar de política, mucha política, y hubo referencias a cada uno de los posibles candidatos de la Alianza “Va por México”, tales como Silvano Aureoles, único por el PRD; de Santiago Creel, Juan Carlos Romero Hicks, Ricardo Anaya y por supuesto Lilly Téllez, la más “entrona”, por el PAN; y por el PRI, Beatriz Paredes, Enrique De la Madrid, Alfredo del Mazo y la propia Claudia Ruiz Massieu; por Movimiento Ciudadano, Luis Donaldo Colosio Riojas y Samuel García, ambos gobernante, uno de Monterrey y el otro del estado de Nuevo León. Al decantarlos, nos quedamos como posibles solo a Lily Téllez, a Enrique De la Madrid y a Claudia Ruiz Massieu, para confrontar al mejor posicionado sin duda del partido Morena, el canciller Marcelo Ebrard, pero nos cuestionamos: ¿lo dejarán llegar? ¿O lo avasallarán Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López?
Ya pasadas las 11:30 horas culminamos nuestro coloquio y la senadora Claudia Ruiz Massieu se retiró a la reunión con los miembros de la Concamin, donde les habló de la agenda legislativa para el próximo periodo de sesiones y detalló una síntesis de las “reformas que el Congreso ha hecho en los últimos cuatro años, con muchas de las cuales la oposición, conformada en el llamado ‘Bloque de Contención’, ha estado en desacuerdo” /Periódico AM, pág. B6, 28/01/2023).
Esperemos que esta presencia haya sido el inicio de una buena relación entre coterráneos guanajuatenses y Claudia Ruiz Massieu Salinas, una opción más para México.
Claudia Ruiz Massieu, estirpe de estadista
Su tonalidad de voz es la adecuada, su sonido un poco grave le ayuda aún más en la claridad de su expresión; cuando lo desea y de manera selectiva, dependiendo del tema, levanta la voz, pero en general es suave y serena.