La Red Comunitaria del Conservatorio de Celaya es un proyecto social de índole musical, que por su origen, busca más que formar músicos, su objetivo primordial es incidir en el sector infantil y juvenil de la región para brindarles una formación de vida. 

Chicos de 8 a 17 años que conforman agrupaciones como orquestas y coros, son instruidos en el área musical mientras aprenden compromiso, respeto, disciplina, convivencia y un abanico de valores que les aportan herramientas para enfrentarse a la vida de una forma distinta a la que actualmente podrían encontrar en su entorno.

“Lo que tratamos de hacer y estamos convencidos de ello, es curar un poquito el tejido social”, afirma el coordinador de la Red, Antonio Campos, músico instrumentista egresado del Conservatorio y quien ha trabajado desde 2016 con este tipo de esquemas.

Entrega de instrumentos a la Orquesta de Cortazar. Foto: Cortesía Antonio Campos.

Fue en enero del año pasado cuando se presentó el proyecto ejecutivo para crear tres orquestas infantiles y un coro en sectores sensibles de la población; y para mayo, Celaya, Cortazar y Los Apaseos ya tenían consolidadas sus agrupaciones.

Con apoyo del FIDESSEG (fideicomiso destinado a apoyar proyectos de desarrollo social y seguridad pública en el estado) y de los Centros Gto Contigo Sí que aportan su espacio y población cautiva, la Red Comunitaria atiende actualmente alrededor de 240 pequeños, pero muy pronto serán más de 400, pues gracias al impacto que ha causado el programa ya se aprobó la creación de cuatro agrupaciones más (una orquesta en Monte Blanco y orquesta y coro en Villas del Romeral, Celaya; así como un ensamble de cuerdas en Juventino Rosas).

“Los enseñamos de cero, les damos formación cien por ciento musical, aprenden a leer partituras y les prestamos el instrumento; el impacto primordial es que tienen en la mano un instrumento que en su vida cotidiana no tendrían oportunidad de tenerlo o que ni siquiera conocían, ahora pueden tenerlo, tocarlo y recibir clases de alto nivel y de manera gratuita”, comparte.

La Orquesta sede ‘El Pípila’, abriendo el concierto de Navidad de la Camerata del Conservatorio, en Cortazar. Foto: Cortesía Antonio Campos. 

Antonio Campos explica que con esta formación musical les ofrecen ‘un oasis de por lo menos doce horas’ en las que aprenden a convivir con otros chicos y además adquieren hábitos y responsabilidades.

“Ellos aprenden a organizar su tiempo para cumplir con sus actividades de la escuela, tener recreación y cumplir con la orquesta; porque tienen que asistir 4 días a la semana por tres horas, además cuidar y limpiar su instrumento y practicar en casa”, detalla.

El coordinador de la red se dice convencido de que esta clase de proyectos son fundamentales para cualquier sociedad, y que Celaya tiene aún muchos sectores en donde se pueden hacer más agrupaciones, sobre todo en las zonas susceptibles que es para donde están dirigidos.

La Orquesta del Barrio de San Miguel en la sala de ensayos en el Conservatorio. Fotos: Cortesía Antonio Campos. 

“Las orquestas comunitarias en una sola palabra significan amor, los maestros realmente se enamoran del proyecto y de sus niños; muchas personas me dicen ‘oye, cómo que estás trabajando en tal lugar, si está bien horrible’, pues a eso voy… A eso vamos, somos un equipo de avanzada y con una pequeña piedrita vamos cambiando la sociedad”, expresa.

Para crear este tipo de proyectos y mantenerlos es necesario que la sociedad se sume, ya que cualquier persona puede apoyar.

“(Quiero) invitar a la sociedad a que se acerquen a nosotros para ver cómo sí hacer las cosas, todos pueden sumar, desde alguien que diga yo les puedo donar uniformes, instrumentos, cuerdas o cualquier cosa… Sí son profesionistas pueden donar una plática, este es un gran barco en el que se puede subir cualquiera que quiera aportar”.

Antonio Campos pide a la sociedad que apoyen estos proyectos y también que compartan las cosas buenas que pasan en la comunidad.

Chicos de la Orquesta El Rehilete, de Villagrán, durante su primer día de actividades. Foto: Cortesía Antonio Campos. 

¡Estrenan orquesta en Villagrán!

Cuando Grupo D’ACERO conoció el proyecto de las orquestas comunitarias, simplemente se enamoró de él, y hace poco más de tres semanas que su fundación, en conjunto con el Conservatorio de Celaya, estrenaron la Orquesta Comunitaria sede El Rehilete, en Villagrán.

“Se nos acercó Fundación D’Acero que querían hacer algo en la zona y les propusimos esto (la orquesta comunitaria) y se enamoraron, la acabamos de abrir en El Rehilete, cien por ciento financiada por D’Acero”, afirma Antonio Campos.

La quinta agrupación de la Red, suma al momento 45 integrantes, inició actividad el 9 de enero y es un ejemplo más de cómo el empresariado y la sociedad civil pueden impactar positivamente en la comunidad.

“Yo lo veo, la comunidad sí se transforma y estoy convencido de que estos proyectos son indispensables, y aquí en el Conservatorio estamos creando una gran comunidad”, añade.

Orquesta de la sede ‘El Pípila’, de Cortazar. Fotos: Cortesía Antonio Campos.

EL DATO 

La Red Comunitaria arrancó en enero de 2022 y se consolidó en marzo de ese año; entre junio y diciembre todas las agrupaciones ya habían realizado presentaciones.

SEDES PRIMERA ETAPA:  

  • Cortazar – Sede Centro Gto Contigo Sí El Pípila (Orquesta)
  • Celaya – Sede Centro Gto Contigo Sí Las Américas (Coro) 
  • Celaya – Sede Barrio de San Miguel (Orquesta) 
  • Apaseo El Alto – Sede Casa de la Cultura (Orquesta)
  • Apaseo El Grande – Sede Casa de la Cultura (Orquesta) 

LAS NUEVAS SEDES

  • Villagrán – Sede El Rehilete en conjunto con Fundación Acero (Orquesta)
  • Juventino – Orquesta
  • Monteblanco – Orquesta
  • Villas del Romeral- Coro y ensamble de guitarras
  • Fotos: Cortesía Antonio Campos. 

Orquesta de Apaseo el Alto. Foto: Cortesía Antonio Campos.

Orquesta de Apaseo el Alto. Foto: Cortesía Antonio Campos.

Orquesta de Apaseo el Alto. Foto: Cortesía Antonio Campos.

Orquesta de Apaseo el Alto. Foto: Cortesía Antonio Campos.

Orquesta de Apaseo el Alto. Foto: Cortesía Antonio Campos.

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