Tras 28 años de relación Teresita Arellano de 70 años y Juan Pacheco de 66, decidieron poner la cereza al pastel y consagrar su relación en matrimonio.
Después de divorciarse hace poco más de 30 años, Teresita creyó que jamás encontraría un verdadero amor, sin imaginar que Juan, un hombre al que describió como respetuoso, trabajador y muy cariñoso, llegó a su vida.
Los deseos de Juan, originario de Huejutla, por contraer nupcias, eran muy grandes. No obstante, la situación legal del matrimonio pasado de su novia, ahora esposa, no lo permitían, por lo que al solucionar la situación no dudaron ni un momento para unir sus vidas.
Los dos ´tortolitos´ protagonistas de esta historia formaron parte de las 171 parejas que se casaron en las bodas colectivas este 14 de febrero en Pachuca, donde se juraron amor eterno sin importar su avanzada edad.
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EL COMERCIO LOS UNIÓ
De profesión comerciantes, Teresita y Juan se conocieron mientras desempeñaban su labor y con el tiempo se fueron enamorando por su gusto por el baile.
“Las canciones de Los Ángeles Azules nos unieron”, dijo la pareja de recién casados en entrevista con AM Hidalgo.
La firmeza, el respeto y sobre todo el apoyo moral que Juan le brindó a Teresita, fueron las principales cualidades que vio en su ahora esposo para aceptar la unión que concretaron este martes 14 de febrero.
LA DESMAÑANADA POR LA BODA
Juan, quien se dice muy metodista, admitió entre risas que sintió un poco de nervios por el gran día que les esperaba, por lo que despertó a su amada desde las 4:00 horas para que no se les hiciera tarde por ningún detalle.
Un vestido azul con flores plateadas, acompañado por un suéter negro con brillantes, fueron las prendas que engalanaron a la novia. Mientras que el novio vistió un elegante traje gris con una camisa azul.
“Me levanto a las 4:30 de la mañana para que no se nos hiciera tarde, sentimos un poco de nervios, pensando en cómo iba a ser el evento, pero ya aquí se quitaron”, comentó Juan.
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EL RESPETO, LA CLAVE DE SU RELACIÓN
El mutuo respeto es lo que consideraron, tanto Teresita como Juan, como las claves de su larga relación que ahora trasladaron a un nivel más alto de compromiso.
Por ello recomendaron a las jóvenes parejas que se dieron cita en los matrimonios colectivos que tengan respeto y amor mutuo como los pilares de su relación, además de una comunicación y confianza inquebrantables.
Muy felices, los recién casados se dispusieron a celebrar en casa este importante acontecimiento, no sin antes recordar que lo que unió dios no lo puede separar el hombre.