Ahora que las marchas están de moda también debemos organizar, pero urge, una protesta para exigir a la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim) garantice el abasto de este bien básico en todos los hogares.
Los líderes de PRI, PAN o PRD, que defienden al Instituto Nacional Electoral (INE) con la consigna de que su voto no se toca, hasta el momento no se han enterado que las colonias de la zona metropolitana de Pachuca acumulan meses sin agua y no hay ningún indicio que permita anticipar que dicha situación acabará a corto plazo, vamos, algún día.
Al priismo, que aprende a marchas forzadas sus lecciones de ser oposición en Hidalgo, no habría que exigirle demasiado pues lento es el aprendizaje. No así al PAN y PRD que llevan años tratando de ganar elecciones al gobierno de Hidalgo y se supone que tienen alguna experiencia.
Si todo es político en una sociedad el desabasto de agua va en primer lugar hasta el momento. Cualquier campaña que se considere exitosa logra identificar las necesidades y percepciones de la población para aprovecharlas y ofrecer una plataforma política atractiva. Y que gane elecciones.
Los dirigentes de PAN y PRD están en la luna o ellos no padecen el desabasto en sus casas; sin embargo, el tiempo es ideal para que a alguien en esos partidos se le ocurra la brillante idea de lanzar una campaña con el mensaje agua para todos previo a las elecciones de alcaldes en los municipios aledaños a la capital, atendidos por Caasim.
El descontento social por la falta de agua es creciente en Pachuca, agravado por la pésima estrategia de comunicación de Caasim que en lugar de administrar la crisis, evitar impactos negativos en la medida de lo posible, la fomenta con sus mensajes en redes sociales de reparaciones de fugas y apoyos de pipas, pues solo contribuye a la percepción ciudadana de que el desabasto recrudeció en la nueva administración del gobierno de Hidalgo.
Vaya favor de Caasim para el próximo candidato del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que deberá recorrer las colonias pachuqueñas con la finalidad de pedir el voto.
Los movimientos sociales no han tenido la participación de los partidos políticos. Recordemos las protestas contra el inicio del Tuzobús cuando marcharon jóvenes, adultos mayores y estudiantes que al ser afectados por un sistema de transporte ineficaz y caro tomaron las calles para exigir al gobierno mejorar el servicio.
Es poco probable que algún partido político abandere el derecho al agua como un bien básico, pero a los ciudadanos nos queda la libertad de usar la palabra.
Además, en un estado donde la inversión de Tesla significa el presupuesto que recibe Hidalgo en tres años, es necesario que sus autoridades se muestren más decididas para que la empresa armadora de autos eléctricos se instale en la entidad.
Tanto el estado y el gobierno federal tienen el mismo proyecto de nación y es tiempo de hacerlo valer. No podemos permitir que suceda lo de la administración pasada: varios hidalguenses ocuparon altos cargos en la federación y actualmente seguimos en los primeros lugares de pobreza y subdesarrollo.
La opinión expresada en esta columna es responsabilidad de su autor (a) y no necesariamente representa la postura de AM Hidalgo