Ciudad de México.- En el momento más álgido de la pandemia con la escasez de medicamentos y previo a la etapa masiva de vacunación, el hijo del Presidente recibió un trato exclusivo cuando enfermó de COVID-19, según asegura el reportaje de Latinus “Se acabaron los privilegios”.
En 2021, José Ramón López Beltrán requirió hospitalización por su padecimiento, por lo que fue ingresado al Hospital Central Militar.
De acuerdo con la investigación realizada por Latinus le consiguieron Remdesivir, el medicamento utilizado como tratamiento contra el SARS-COV2 y que en la fecha en que enfermó aún no era aprobado por la Cofepris y tenía un costo de 40 mil pesos, por lo que pocas personas podrían adquirirlo en ese momento.
En el video se describe la ruta que siguieron dos unidades oficiales del ejército que se movilizaron con el objetivo de conseguir el medicamento para el hijo del Presidente. De acuerdo con el reportaje, el traslado se realizó desde la aduana del AICM al almacén de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México.
“Se acabaron los privilegios” dice la leyenda del reportaje ante la frase que Andrés Manuel López Obrador repite con frecuencia sobre el proyecto de la 4T.
Los datos recabados se obtuvieron de los correos que se filtraron tras el hackeo masivo a Sedena conocido como Guacamaya Leaks. En los documentos, miembros de la Sedena corroboran esta acción.
La FDA de Estados Unidos autorizó en 2020 el uso de Remdesivir como tratamiento para COVID-19 en pacientes hospitalizados. Un año después, en marzo de 2021, la Cofepris dio luz verde para su uso de emergencia, un mes después de que Sedena lo consiguiera para José Ramón López, en febrero.
La Sedena y la Secretaría de Salud niegan esta acción que se sostiene en la serie de correos extraídos del hackeo masivo a la Defensa Nacional.
JRL