León, Guanajuato.- Lo que inició como una actividad de consumo propio para los habitantes de lo que hace cuatro siglos era la Villa de León, ahora es un emblema de la identidad de León, Guanajuato y lo identifica a nivel nacional e incluso internacional, es la curtiduría.
Familias como la de Narciso Ayala han pasado los conocimientos de la correduría de generación en generación, pues su padre y su abuelo también trabajaron en la transformación de las pieles.
El singular olor de las pieles durante el proceso de curtido han sido parte de su día a día, y en los viajes que ha hecho fuera de León ha contado con orgullo sobre este que hacer.
La evolución ha sido notoria en varios de los pasos del proceso para convertir la piel en un material que no se pudre y se puede procesar para hacer otros productos, pero algunos prevalecen casi iguales en muchas de las curtidurías de la ciudad.
El empresario curtidor Chema Padilla también ha vivido este progreso en esta industria que considera “el bastión para el crecimiento de la ciudad”.
Esta parte de la historia e identidad de la ciudad te la contamos en el episodio 1 de Panzasverdes la serie documental original de Periódico AM.
ZV.