León, Guanajuato.- Luis de Alba es reconocido por ser una leyenda de la comedia en México, sin embargo, para él las cosas han cambiado y los standoperos han sobrepasado la línea del respeto para el público. 

Luis de Alba mejor conocido como ‘El Pirruris’ creó un estilo con el que se ganó el aprecio de los mexicanos, en entrevista, habló sobre los standoperos y cómo han pasado el nivel del respeto a familias y niños. 

Hay muchos jóvenes que tienen mucho talento, pero se equivocan porque hacen stand up y piensan que lo primero que tienen que hacer es mentar la madre, de ahí hablar de su mamá, de sus hermanos, de sus primos, esas cosas que son muy vulgares. Cuando me piden consejos los chavos, que nos consideran viejitos, decimos que nuestra comedia se basó en un  respeto al público, a la  familia, no decimos nada vulgar y eso me da mucho orgullo”, resaltó en entrevista con AM. 

Si bien Luis de Alba también creó proyectos de comedia para adultos, estos eran restringidos a los niños, pero con las redes sociales todo ha cambiado. 

Luis de Alba es de los comediantes más longevos. Foto: Especial. 

“Hay un código, nos decía el señor Azcárraga Milmo -expresidente de Televisa- que no podíamos decir ni un ‘wey’ ni una majadería, prohibídisimo vestirse de mujer o hacer papeles de homosexual…o sea, teníamos prohibiciones de hablar con cosas fuertes para los niños, de sexo fuerte como chiste, de tal manera que si alguien se pasaba pa’fuera. Como le pasó al Loco Valdéz cuando habló de Benito Juárez y lo vetaron”, recordó. 

Luis de Alba habló de los standoperos de México. Foto: ESPECIAL 

Luis de Alba se defiende de quienes podrían llamarlo conservador, pues considera que una cosa es el respeto, la libertad y el libertinaje. 

Es como si una gente que no conocemos, llega a nuestra casa empieza diciendo cosas que no nos gusta que nos falten al respeto, a nuestras mujeres, pero ahora hasta las niñas andan con su ‘qué onda wey’, ‘está cab…”, enfatizó.

El actor consideró que hace falta más respeto a quienes consumen comedia, pues no hay necesidad de utilizar lenguaje soez para hacer reír a la gente. 


 

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