Checo Pérez ganó el Gran Premio de Azerbaiyán de la Fórmula 1 y resaltó cómo debió manejar la presión de su coequipero en Red Bull, Max Verstappen.
“Logramos administrar la presión al máximo, fue muy buen trabajo de equipo”, comentó Checo recién terminó la carrera, cuarta del campeonato 2023 y que derivó en su segunda victoria del año.
“Fue muy duro para los dos, Max me empujó y me presionó muy bien”, añadió Pérez, refiriéndose a la persecución de Verstappen, quien perdió la punta en la vuelta 11, debido a la entrada del auto de seguridad.
“Tuvimos mejor degradación en el primer stint y luego vino el auto de seguridad y se convirtió en otra carrera con el neumático duro”.
Pérez lamentó una desconcentración en el giro 35, cuando su Red Bull rozó el muro de seguridad, aunque no tuvo daños.
“Ttuve un pequeño golpe y tuve mucha suerte para seguir y que no explotara el neumático”, aceptó.