El Día del Trabajo, celebrado el 1 de mayo en todo el mundo, ha sido marcado por una ola mundial de manifestaciones de trabajadores que exigen justicia económica y mejoras en sus condiciones laborales.
Esta oleada de descontento no se había visto desde antes de que la pandemia de COVID-19 enviara al mundo a confinamientos.
En Francia, España, Alemania y prácticamente toda Europa
En Europa, los franceses han salido a las calles para protestar contra la reforma de ley que aumenta la edad de jubilación.
La policía ha arremetido contra manifestantes radicales que rompían ventanas de bancos mientras que los sindicatos presionan al presidente Emmanuel Macron para que la elimine.
Los activistas ecologistas también han participado en las manifestaciones, pintando con aerosol un museo Louis Vuitton en París.
En España, los abogados han exigido el derecho a tomarse días libres mientras que en Alemania, los manifestantes han protestado contra la violencia hacia las mujeres y las personas de la comunidad LGBTQ+.
En Turquía, las celebraciones del Día del Trabajo se han visto eclipsadas por las tensiones políticas ya que el país se prepara para realizar elecciones.
En Rusia, la guerra en Ucrania ha eclipsado los pocos eventos en Moscú, donde las celebraciones por el Día del Trabajo alguna vez fueron eventos masivos.
También se manifiestan en China y Corea del Sur, en Asia
En Asia, los trabajadores han expresado su frustración acumulada después de tres años de restricciones por la pandemia de COVID-19.
Los activistas en muchos países han argumentado que los gobiernos deberían hacer más para mejorar la vida de los trabajadores.
En Corea del Sur, los trabajadores han abogado por salarios más altos mientras que en el Líbano, las trabajadoras domésticas migrantes han marchado en un país sumido en una crisis económica.
Según la OCDE, la explotación laboral es un problema en todo el mundo.
En muchos países, los trabajadores sufren de bajos salarios, horarios de trabajo excesivos, discriminación y falta de protección laboral.
La OCDE insta a los gobiernos a adoptar medidas para mejorar las condiciones laborales y promover una distribución justa de la riqueza.
(Con información de la AP)
HEP